El PP invita al PNV a ''tranquilizar la situación'', quien habla de acuerdos entre ''distintas sensibilidades''

El Partido Popular del País Vasco ha tendido hoy la mano al PNV para "tranquilizar la situación" y evitar que las reivindicaciones de la izquierda abertzale "marquen la agenda política" de Euskadi, mientras que el Gobierno Vasco afirma que este "el momento de los grandes acuerdos" y de trabajar en favor de que las "distintas sensibilidades políticas" se sumen al proyecto de "conseguir juntos la paz".

El presidente del PP en Gipuzkoa y portavoz parlamentario, Borja Sémper, ha explicado hoy, en un desayuno con los medios de comunicación en San Sebastián, que la máxima dirigente del partido, Arantza Quiroga, ha solicitado una reunión al lehendakari, Iñigo Urkullu, para tratar de rebajar la tensión de los últimos días y "encauzar algo que se ha torcido y no debería de haberse torcido".

"El objetivo es volver a un escenario de tranquilidad, de confianza y de compartir cosas básicas", ha manifestado el dirigente popular, que entiende que el PNV se ha "escorado hacia un lugar que no le conviene a la sociedad vasca".

Sémper considera un "error" la convocatoria de la manifestación del sábado y aboga por recomponer un mínimo acuerdo entre los jeltzales, el PSE-EE y el PP en la defensa de principios fundamentales.

"No podemos permitir que la agenda política, que el liderazgo político de Euskadi, lo marquen las reivindicaciones de la izquierda abertzale", ha manifestado.

El líder del PP de Gipuzkoa ha atribuido a las "ansiedades, miedos y vértigos" del PNV, que se siente presionado por la izquierda abertzale, la "torpeza" de "dar cobertura a una manifestación en la que no pintaba nada un partido democrático".

"¿Andoni Ortuzar es nuevo en política?, ¿el PNV es un partido bisoño?, ¿se iban a manifestar por las calles de Bilbao y no intuían lo que iba a pasar?, ¿no intuían que eran una muleta de la izquierda abertzale para legitimar determinadas reivindicaciones?", se ha preguntado Sémper, quien ha considerado que en este caso, los jeltzales han "flaqueado" ante la presión de EH Bildu.

En su opinión, la política vasca "no puede estar protagonizada por quienes tienen un problemón con sus presos", por lo que ha abogado por recomponer "la unidad política que tenga como objetivo conseguir la disolución de ETA".

''EL MOMENTO DE LOS GRANDES ACUERDOS''

Por su parte, el portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha defendido hoy que es "el momento de los grandes acuerdos" y ha insistido en el compromiso del Ejecutivo por trabajar en favor de que las "distintas sensibilidades políticas se sumen a una visión compartida en favor de la paz y la convivencia en Euskadi".

La valoración del Gobierno Vasco va en la línea de la efectuada ayer por el lehendakari, Iñigo Urkullu, quien expresó su compromiso a trabajar "por una visión compartida entre las distintas sensibilidades políticas" con el fin de "construir juntos la paz y la convivencia".

Erkoreka ha hecho hincapié también en la necesidad de dar pasos adelante, para lo que ha considerado indispensable el "inmediato desarme de ETA" y un cambio en la política penitenciaria del Gobierno central.

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