El PP carga contra una edil de Lugo por contratar a su hijo ''sin formación apropiada''

El PP solicitó este viernes la dimisión de la edil de Cultura del Ayuntamiento de Lugo por la contratación de su hijo en el centro de día Antonio Gandoy "sin formación laboral apropiada", así como por el "descontrol" que, en su opinión, existe en los servicios sociales municipales.

Tanto el PP como el BNG reprobaron este viernes el comportamiento de la concejala, Carmen Basadre —también edil de Servicios Sociales—una vez concluida la comisión de investigación creada en su día, a raíz del suceso ocurrido cuando un hijo de Basadre se disparó accidentalmente en un pie en el centro de día Antonio Gandoy donde trabajaba, y por lo que fue despedido.

El portavoz local del PP, Jaime Castiñeira, incidió en que la contratación del joven se produjo sin que "tuviera una formación laboral apropiada" a raíz del "descontrol absoluto de los servicios sociales".

Según la documentación que el gobierno local trasladó a la comisión de investigación, esta persona "cuenta con estudios de BUP y dos cursos impartidos en su centro de trabajo, relacionados con auxiliar de enfermería en geriatría y atención especializada a enfermos de Alzheimer, de 300 a 240 horas de duración, respectivamente.

Sin embargo, desde el PP se apunta que "para ejercer de animador sociocultural deberá de acreditar una diplomatura en Educación Social, una habilitación equivalente o una FP III como Técnico de Animación Sociocultural".

Castiñeira matizó que son "conscientes" en su grupo de que "Basadre no es responsable del disparo que se produjo, ni de las actitudes de su hijo, pero sí es responsable del control de la empresa que contrata". "Y eso no se hizo adecuadamente, y por eso pedimos su dimisión. El pliego de condiciones son para cumplir y las facturas que se derivan de ese pliego de condiciones las pagamos con el dinero de todos los lucenses", ha zanjado.

En el BNG, la concejala Paz Abraira precisó que el trabajo de los nacionalistas en la comisión iba por el camino de "esclarecer todo lo que tiene que ver con el altercado sufrido en agosto pasado, donde un empleado se disparó con un arma de fuego". Para el BNG, lo prioritario fue "que ese trabajador fuera apartado de toda relación con los centros sociales y de día, cosa que se hizo".

"Lo que sí detectamos en la comisión es que existe por parte del Ayuntamiento de Lugo un descontrol administrativo sobre el pliego de condiciones que debe cumplir la empresa, no sobre el funcionamiento del centro porque la atención que se presta en Antonio Gandoy es correcta", matizó la nacionalista.

Dicho esto, Abraira subrayó que para los nacionalistas queda "en el debe de la ética personal y política de la anterior concejal de bienestar social, Carmen Basadre, el tener trabajando a una persona directamente relacionada con ella" en una empresa que realizaba trabajos para el Ayuntamiento lucense.

Comentarios