La creación de la plaza de tesorero con habilitación de carácter nacional en el Concello de Sarria quedó el jueves aprobada de forma definitiva en un pleno breve y madrugador, con los votos a favor de los ediles de la oposición y en contra de los miembros del grupo de gobierno, que cuestionan la legalidad de la reducción salarial forzada y no descartan que se produzca una impugnación.
El acuerdo aprobado con los diez votos que suman PP, IG y dos ediles no adscritos rebaja en unos 15.000 euros la retribución del puesto, al pasar de 20.000 a 8.000 el complemento específico y bajar en otros 3.000 el de destino.
Según sostienen, la plaza tendrá un coste global para las arcas municipales de unos 45.000 euros al año frente a los 60.000 de la propuesta anterior. «A nosa postura é conseguir un aforro para que non sexa unha carga económica para as arcas municipais», dijeron.
El acuerdo contempla también la agrupación de concellos, de modo que el tesorero sea compartido por varios municipios.
El gobierno sarriano (faltaba un edil) pone en entredicho la legalidad de la decisión adoptada por el pleno y ello en base a un informe de secretaría, según el cual el mínimo legal para el complemento de destino de este puesto es de 20.000 euros, por lo que no podría bajar de esa cantidad.
Además, se apoya en la opinión de los sindicatos, que en la mesa de negociación celebrada esta semana se mostraron de forma unánime en contra de la rebaja en la retribución y se reafirmaron en la postura de mayo de 2016.
La alcaldesa dijo haber trasladado ya el acuerdo plenario a la Diputación para su publicación en el BOP a la mayor brevedad, paso necesario para que la Xunta inicie la clasificación de la plaza. Según indicó, la rebaja salarial podría ser impugnada en el contencioso por el colegio de tesoreros u otra persona que se considere perjudicada.
