La revisión del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de O Incio, un documento que lleva dos años atascado, saldrá adelante en un breve plazo si se cumplen las previsiones del nuevo grupo de gobierno, que lo situó como una de sus prioridades.
Hasta cuatro veces fue a pleno el modificado del PXOM durante el último mandato y las cuatro quedó sobre la mesa al existir discrepancias entre el gobierno y la oposición. La alcaldesa, la socialista Laura Celeiro, que entonces gobernaba en minoría con solo tres ediles, no tuvo los apoyos suficientes para aprobar el documento urbanístico, una situación que ahora se verá invertida al obtener mayoría absoluta en las elecciones del pasado 24 de mayo, que le reportaron cinco ediles frente a tres del PP y uno del BNG.
El Concello de O Incio fue el primero de la provincia de Lugo en contar con Plan Xeral, el cual fue aprobado en diciembre de 2005. Cinco años más tarde, a raíz de una actualización de valores realizada por Catastro, se puso sobre la mesa la necesidad de modificar el documento para poder reducir así el suelo urbano, calificación en la que entraba el 60 por ciento del territorio municipal.
Calificación del suelo. El cambio en el PXOM comenzó a redactarse en 2011 con el objetivo de minimizar el impacto económico de aquella revisión catastral, de modo que permitiese variar la calificación del suelo y, en consecuencia, que los propietarios pagasen menos por sus fincas. Mientras se tramitó se aplicaron rebajas por parte del Ayuntamiento en el impuesto de bienes inmuebles para paliar la repercusión de los nuevos valores de Catastro.
La elaboración del modificado del PXOM se dio por rematada en abril de 2013 y, en julio de ese mismo año, fue a pleno por primera vez para su aprobación, pero quedó rechazado. Desde entonces y hasta el pasado octubre, el gobierno lo presentó otras tres veces, con igual resultado. El PP condicionó su apoyo a la inclusión de aspectos que veía imprescindibles, como el área industrial de Laiosa y el inventario de caminos del municipio, una relación que en parte ya estaba elaborada y que el partido se ofreció a rematar financiando su coste con cargo a la asignación que recibía del Concello.
Campaña. No hubo consenso entre las distintas fuerzas y la situación se enquistó tanto que incluso fue uno de los caballos de batalla de la campaña electoral, de modo que la regidora pidió por carta de forma expresa a los vecinos el voto para «aprobar dunha vez por todas a modificación do PXOM».
Con estos precedentes, todo apunta a que el documento será presentado en fechas próximas para su aprobación, tras lo cual habrá un período de exposición al público para la formulación de alegaciones o reclamaciones.
Con carácter previo habrá de celebrarse el pleno de composición del gobierno, el cual está previsto para el próximo viernes. Servirá para aprobar el reparto de delegaciones entre ediles, las dedicaciones y los salarios, entre otros asuntos, como la periodicidad de los plenos, la composición de la junta de gobierno o el importe de las dietas. Se prevé que la alcaldesa tenga de nuevo dedicación exclusiva al Ayuntamiento durante los próximos cuatro años.
El PXOM de O Incio fue el primero de un pequeño concello lucense en aprobarse, en 2005, y está en revisión desde 2011.
