El nuevo pavimento del paseo del Malecón de Sarria, cuyos trabajos comenzaron hace tres semanas, convence a los hosteleros de la zona, si bien reclaman celeridad en la actuación porque esta vía peatonal lleva en obras desde hace cerca de un año.
El estado en el que había quedado el firme con la primera fase del proyecto del encauzamiento del río Sarria generó quejas tanto de vecinos como de empresarios porque se trataba de cemento sin pulir. La Confederación Hidrográfica realiza ahora obras complementarias, con un presupuesto de más de 220.000 euros y en las que se incluye el pavimento.
Los hosteleros coinciden en señalar que "queda mellor que antes", resume la dueña de Taberna da Pili. "É máis bonito. Co outro so parecía que non acabaran as obras. Espero que o fagan ben e non fagan tantos horrores coma antes", opina el responsable de otro bar, que prefiere no dar su nombre. Critica la duración de los trabajos, de los que "estamos ata arriba, xa nos acostumamos ás vallas", pero destaca que la empresa adjudicataria de la actuación "anda máis rápido cá outra".
Para el propietario de un tercer establecimiento, el nuevo pavimento también queda "mellor", pero insta a rematarlo "xa". Con él coincide, Carlos Rodríguez, de la heladería Fiordilatte, quien afirma que la actuación "vai rápida, pero como empece a chover prolongarase". En cuanto al acabado, dice que el firme sigue siendo "áspero e se cae un pequeno continúa facéndose dano".
Por su parte, un quinto hostelero, que también prefiere el anonimato, reclama igualmente que se finalice pronto la actuación, que "parece a obra do Escorial". "Desta vez vai máis rápido. Ata traballan o sábado durante todo o día algúns dos operarios", explica.
El propietario de otro local apunta que este pavimento "se barre mejor". "Es más apropiado. Con el hormigón cuando cae algo, como vino, suele chupar y la mancha se extiende", asegura.
pérdidas. La prolongación de las obras «perjudica» a los empresarios y este último propietario critica que la reforma del firme comenzara en septiembre, «un mes bueno de peregrinos y en el que tenemos muchos clientes». Esto se dejó notar en la recaudación al tener que retirar las terrazas y calcula que el pasado mes perdió «un 40 por ciento» de beneficios con respecto al año pasado. «Nosotros estábamos contentos con que se hiciera la obra, pero quedó mal. Nos reducen mesas y hay demasiado asiento, mientras que en el otro lado del río se necesitaban más bancos», opina.
La actuación no es ejecutada por la empresa adjudicataria de la primera fase del proyecto del encauzamiento, sino por otra firma, Tragsa. Los trabajos en el Malecón conllevan el fresado de la superficie del pavimento, la aplicación de una resina y de un árido coloreado y el sellado del firme con resina transparente. Estas obras comenzaron a finales de septiembre y se ejecutan por fases, de forma que ya se completaron en la zona más próxima a los edificios y en parte del tramo comprendido entre Ponte Ribeira y la pasarela del hotel.
La empresa adjudicataria calculaba al iniciar los trabajos que la mejora del suelo se podría prolongar aproximadamente durante un mes, aunque supeditados a las condiciones meteorológicas porque no se pueden llevar a cabo con lluvias y bajas temperaturas.
En estas obras complementarias también se contempla la sustitución del firme situado junto a los bancos y la instalación de un pavimento drenante en los alcorques de los árboles.
En cuanto a los bancos del paseo, los asientos ya fueron retirados y se procederá a modificar su diseño para minimizar la deformación de la madera y la aparición de hendiduras.
La actuación, además, supuso ya la limpieza y el pintado de la barandilla de José Díaz Fuentes.
