COMARCA. El mapa vuelve a teñirse de azul y Friol bate récords

El 25-S volvió a confirmar la hegemonía del PP en la comarca de Lugo, que se tiñó completamente de azul al imponerse los populares en todos los concellos, incluidos Rábade y Castroverde, en donde no están en la alcaldía.

Ese triunfo incontestable, con porcentajes de voto superiores al 50% en todos los municipios salvo en el castroverdense, alcanzó su cenit en Friol, un tradicional bastión popular en el que esta vez los apoyos se dispararon, al superar el PP el 70% de los votos, mejorando sus guarismos en relación a anteriores comicios autonómicos.

Como hace cuatro años, la segunda fuerza en número de apoyos en la comarca fue el PSOE, aunque esta vez encontró más oposición de En Marea, que superó a los socialistas en Rábade y Outeiro de Rei. En ese último concello, el PSOE incluso quedó por detrás del BNG. Los socialistas tuvieron su mejor resultado en Castroverde, en donde gobiernan, al lograr el 35% de los votos, aunque no fue suficiente para adelantar al PP, que ya se impuso en esa plaza en las elecciones gallegas del 2012.

Por su parte, En Marea superó los resultados logrados hace cuatro años por Age —la coalición que entonces formaron Anova y EU, antes de la irrupción de Podemos— en todos los concellos salvo en Portomarín. Esa mejoría sirvió a la fuerza que lidera Luís Villares para situarse el 25-S como principal referente de la oposición, tras un inalcanzable PP, en Rábade, en donde En Marea recibió un 17% de los votos, y Outeiro de Rei, en donde recabó casi el 13%.

El BNG, cuarta fuerza en la comarca, obtuvo sus mejores resultados en O Corgo, en donde recabó el 15% de los votos y fue tercero, y en Outeiro de Rei, con casi un 12% y ese mismo puesto. Irrelevante fue la cosecha de votos de Ciudadanos, que en su mejor plaza, Outeiro de Rei, solo cautivó al 3% de los votantes.