El tripartito de Sarria acusó ayer al anterior gobierno de elaborar hasta tres proyectos para la caldera de la piscina cubierta, obra que no se llegó a ejecutar, y denunció que existen "indicios claros" de que los populares tenían ya encargada la caldera y la deshumectadora sin concurso.
"As obras para instalar a caldeira e a deshumectadora xa foran comezadas sen ter a subvención concedida e sen ter licitada a obra co concurso pertinente", denunció la alcaldesa, Pilar López. El gobierno acusó al PP de "buscar unha empresa de Lugo para que se encargara de todo" y aseguró que hay tres facturas registradas en junio en el consistorio por un importe total de 44.000 euros de preinstalación de la deshumectadora y colocación de unos depósitos, entre otras. "Os depósitos os sacaron porque non se poden contratar sen concurso", dijo.
Ante las acusaciones de "prevaricación" vertidas por el PP en el proceso de licitación de la caldera llevado a cabo por el tripartito, asunto que se llevará a pleno a petición de este partido, la alcaldesa afirmó que los populares "non están libres de ser acusados".
El gobierno reitera que se perdió la ayuda para la caldera por "problemas cos prazos" y al no aprobarse una prórroga solicitada
El gobierno denunció que el PP contó con hasta cuatro proyectos muy diferentes para dotar de agua caliente a la infraestructura, tres encargados por este partido. La obra ya venía contemplado en el proyecto de la Diputación de Lugo para construir la piscina. Posteriormente el PP elaboró un proyecto, "que foi presentado na Consellería de Industria para intentar legalizar parte da obra da piscina". Este preveía colocar dos calderas de 270 kilovatios.
Afirmó que el PP encargó en 2014 otro proyecto, aunque en este caso se contemplaban seis calderas de 56 kilovatios. Este fue elaborado para pedir una subvención en 2014, que se perdió "ó non ser capaces nin de sacar os pregos para a licitación existindo unha prórroga dun mes". Según el gobierno, el PP elaboró un nuevo proyecto "a medida", con un coste de "6.000 euros e que está sen pagar". Contemplaba una única caldera de 500 kilovatios.
En cuanto al proceso de licitación de la caldera que inició el tripartito y fue suspendido, afirmó que optó por instalar dos calderas de 200 kilovatios porque "o aconsellou" el Inega. Este concedió al Concello una ayuda para estos trabajos, pero se perdió por "problema dos prazos" y al no aprobarse una prórroga pedida, manifestó.
Negó que los pliegos de licitación para la caldera fuesen ilegales. "Fixéronse moi restrictivos porque o único que se pretendía era a instalación dunha caldeira da mellor calidade", concluyó.
