El plan de dinamización turística del Grupo de Acción Local Pesquera (GALP) recalca la falta de un plan de movilidad en A Mariña-Ortegal que facilite la conectividad para que el visitante llegue al destino y también para desplazarse por él. El análisis efectuado por la firma Valora constata que la red de carreteras, ferroviaria y de autobuses que conecta el territorio resulta «máis que insuficiente» y esta deficiencia lastra el desarrollo turístico.
El documento indica que el aeropuerto gallego más próximo es el de Alvedro (A Coruña), pero no dispone de transporte público hacia los concellos del destino. Además, el único aeropuerto asturiano es Rañón, que está en Castrillón, a solo 15 kilómetros de Avilés, lo que supone una ventaja para el turismo por su proximidad a la comarca de A Mariña. Este dato resulta relevante porque incide en la capacidad de atraer visitantes. La distancia media entre el destino y los aeropuertos gallegos oscila entre una y dos horas, en función del punto de origen.
El estudio indica que el desarrollo socioeconómico y turístico está directamente relacionado con el estado de las carreteras. La red de la zona es de carácter nacional y comarcal, pero además entre los dos concellos situados en los extremos de este territorio costero -Ribadeo y Valdoviño- hay 137 kilómetros, que se recorren en aproximadamente hora y media usando las autovías A-8 y AG-64. Al emplear vías comarcales y autovías el coste del recorrido es nulo.
El destino dispone de estaciones de autobuses o paradas en todos los municipios. Las principales empresas son Alsa y Arriva, aunque en algunos también operan Autobuses de Vivero y Eocar.
La deficiencia de conectividad entre los municipios es notoria si se considera entre los concellos de A Mariña y del Ortegal. El documento pone como ejemplo que el trayecto más largo de Arriva entre Ribadeo y Ortigueira tiene una duración de tres horas y 50 minutos, al tratarse de una ruta con paradas en distintos concellos.
El estudio indica que la información en internet sobre las líneas existentes y horarios, la conectividad con el tren y la movilidad entre los principales recursos y con los aeropuertos es escasa e incluso confusa al no existir un único canal de comunicación.
Otro inconveniente reside en que la mayoría de las líneas de autobús ofertan más frecuencias por la semana, pero reducen el servicio en fin de semana, lo que afecta al visitante, que acude sobre todo esos días.
POTENCIAL. El ferrocarril de Feve que conecta la zona es una red de vía estrecha con múltiples apeaderos y estaciones que recorre el norte de España y recorre el destino. El plan destaca que «faino dunha maneira singular e diferente, que o converte en si mesmo nun atractivo turístico máis». La duración del viaje entre Ribadeo y Ortigueira, tomando la misma referencia que con el autobús, es de una hora y 49 minutos.
Turismo de Galicia ofrece un servicio de trenes turísticos que permite conocer parte del destino y que fue una de las rutas con mayor afluencia de visitantes este verano pasado. Los viajeros van acompañados de un guía y completan el recorrido con algunos tramos en autobús. Pueden visitar cabo Ortegal, Serra da Capelada, Vixía Herbeira, el santuario de San Andrés de Teixido, el faro de Estaca de Bares, O Barqueiro, Ribadeo, el faro de Illa Pancha y la playa de As Catedrais. Este servicio ofrece la posibilidad de conocer el destino de una manera diferente y durante una jornada, larga, pero que obtiene una valoración positiva por parte de los visitantes.
AMPLIA OFERTA. El destino dispone de un amplio patrimonio natural y cultural, entre el que destacan 23 espacios protegidos como Zonas de Especial Conservación (ZEC) y diez Zonas de Especial Protección de Aves (Zepa). Además, entre los recursos culturales destacan la arquitectura civil, con más de 400 inmuebles, y la religiosa, con más de 200 exponentes.
La oferta de la zona está compuesta por 193 establecimientos de alojamientos reglados. Los servicios de hostelería suman 944 y destacan los concellos de Foz, Ribadeo y Viveiro.
Los productos turísticos precisan mejorar la calidad en el servicio, diferenciarse y romper con la estacionalidad, además de campañas de promoción más eficaces. También detectan la falta de una oficina de turismo comarcal y de folletos informativos de todo el territorio en varios idiomas.
