El galeón hundido en la ría de Ribadeo se va deteriorando de forma notable

El equipo del proyecto europeo ForSeaDiscovery arrancó su trabajo en Ribadeo e hizo una primera inmersión muy fructífera en la que constataron que se trata de un yacimiento de una gran importancia
El equipo de arqueólogos subacuáticos, el verano pasado en la ría de Ribadeo.
photo_camera El equipo de arqueólogos subacuáticos, el verano pasado en la ría de Ribadeo.

El equipo del proyecto ForSeaDiscovery financiado por la Unión Europea y que dirige la científica del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas) Ana Crespo llegó a la ría de Ribadeo para realizar una primera inmersión en la zona del estuario en la que se encuentra hundido un galeón que destacaba por su importancia a nivel de conservación. El arqueólogo subacuático Miguel San Claudio, uno de los que se encuentra en Ribadeo realizando las inmersiones, constató la importancia del yacimiento desde un punto de vista arqueológico, aunque al mismo tiempo reconoció que, tras compararlo con anteriores inmersiones, pudo constatar que se está deteriorando de forma notable.

La importancia de este pecio ya había sido puesta de manifiesto en diferentes ocasiones. También lo había sido la circunstancia en la que se encuentra, sometido a un desgaste sensible que San Claudio pudo constatar ayer.

No obstante, con respecto al trabajo que el equipo realizó durante la jornada de ayer, el arqueólogo submarino explicó que se trató de un día fructífero en el que pudieron hacer bastante cosas como colocar una línea base de referencia de cara a la localización del pecio. También añadió que «hicimos las primeras fotos de detalle del propio pecio».

PIEZAS

También indicó Miguel San Claudio que «localizamos las primeras piezas que pueden ser susceptibles» de ser trascendentes y en base a todo ello apuntó que «constatamos la importancia que tiene este yacimiento».

Su trabajo no acabó aquí. A partir de ahora lo que van a hacer es recoger muestras y madera del propio galeón para poder documentar de forma lo más precisa posible el estado exacto en el que se encuentra, así como realizar un proceso de muestreo de todo lo que hay en el entorno.

Eso sí, Miguel San Claudio sí reconoció ese deterioro de la embarcación e indicó que «se le aprecian los daños y el desgaste que tiene». Lo justifica explicando que la madera estuvo muy expuesta al agua con multitud de organismos que la van deteriorando poco a poco «y que es algo que ya pudimos comprobar».

Durante la mañana de hoy continuarán con las inmersiones para avanzar en este trabajo que en principio se prolongará en Ribadeo casi toda la semana.

VIVEIRO. El equipo de arqueológos que inspeccionó la semana pasada los restos del pecio de La Magdalena, situado en Covas, no ofrece más detalles sobre el material localizado para evitar nuevos expolios, ya que la intención es elaborar una memoria para que se pueda llevar a cabo un proyecto de recuperación y conservación de los objetos descubiertos. «Se trata de un elemento único, porque no hay un barco de estas características en muchos sitios».

El especialista Miguel San Claudio, apuntó que en los últimos días hallaron algún objeto que pertenecía al aparejo del buque, que como lo demás está muy afectado por la erosión marina y los ataques biológicos de los moluscos que destruyen la madera, tratada con una capa de brea.

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