El concejal independiente de Sarria, José Manuel Bello, a cuya puerta llamó la alcaldesa el pasado año para buscar su apoyo en la sesión de investidura, ha marcado distancias con la regidora por "perda de confianza". El edil de Independentes de Galicia (IG), que hasta el momento se mantenía en una posición intermedia -en unos casos apoyando propuestas del gobierno y en otros de la oposición-, dejó patente en el último pleno su "decepción" con la actuación de Pilar López, a la que acusó de "ir por libre".
"Para min o apoio que lle dei no seu momento foi correcto e coherente, pero a día de hoxe non", dice el representante de IG
El punto de inflexión, según se desprende de sus intervenciones, fue el incidente ocurrido durante la Noite Meiga, por el cual Bello no dudó en reprobar a la alcaldesa al igual que hicieron los otros nueve ediles de la oposición. "Debe pensar en corrixir ese tipo de actuacións", le espetó el concejal, quien opinó que la conducta de López, pasando con su coche repetidas veces por una zona de pubs de la calle Calvo Sotelo, pitando y haciendo gestos para apartar a los jóvenes que estaban de fiesta, no es una buena carta de presentación "se alguén non a coñecía".
"Para min o apoio que lle dei na sesión de investidura foi correcto e coherente, pero a día de hoxe non", aseguró tras el pleno ordinario del pasado jueves. El edil instó a la alcaldesa socialista a "cambiar" de conductas dado que "está decepcionando os sarriaos", aunque puso en duda que la situación se pueda reconducir porque Pilar López "demostrou sobradamente que pasa de todo o mundo, ata dos dela e dos que a apoiaron", manifestó.
l concejal independiente también recriminó al gobierno en minoría la falta de respuesta a sus escritos ya que, según dijo, desde el pasado mes de julio está a la espera de que le den contestación a sus peticiones de información.
José Manuel Bello apoyó en 2015 la investidura de Pilar López, pero no entró a formar parte del gobierno. Tras la ruptura del pacto tripartito, la regidora lo tanteó para incorporarse, momento en el que decidió quedar al margen con apoyos puntuales. También se apartó de las negociaciones para una moción de censura tras postularse como alcalde. Desde entonces votó junto con el resto de miembros de la oposición en algunos puntos y dio un voto de confianza al gobierno en otros, como la bajada de sueldo de la alcaldesa y la edila de urbanismo, asunto en el que se abstuvo. "Tiven un tempo de confianza cara a vostede, pero decepcionou a moitos", señaló en el último pleno, en el que pasó del apoyo a la reprobación.
