Cerca de 550 personas se dieron este viernes cita en la Praza dos Campos de San Cibrao para participar en la comida conjunta que supone el acto principal del Día del Jubilado, que organiza el Ayuntamiento de Cervo para homenajear a sus mayores. Es una fiesta que, para el regidor cervense, Alfonso Villares, sirve para "hacer más pueblo".
La fiesta se celebra bajo una carpa, y la comida es servida por un hostelero local, cada año diferente. El alcalde reseñó que lo ideal "es que todo redunde en beneficio del municipio", algo que también se ve con el pan y los detalles. "Este año escogimos unos de la cerámica de Sargadelos, que también es una manera de ayudar en la supervivencia de la fábrica," añadió Villares.
