El curso de verano de química de Burela, organizado por la Universidade de A Coruña y el IES Monte Castelo, finalizó ayer tras dos jornadas en las que, bajo un prisma divulgativo, se pusieron de manifiesto distintas perspectivas sobre la ciencia, y se trató de resaltar sus aspectos positivos, corrigiendo la habitual percepción negativa que de ella tiene el ciudadano medio. El taller se saldó con éxito, cubriendo 32 de las 40 plazas ofertadas.
La directora del curso, la profesora del IES Monte Castelo Inés García Seijo, se mostró satisfecha «pola participación, xa que para ser o primeiro ano tivemos un número elevado de participantes, ós que hai que engadir un importante número de ouvintes que se achegaron polo salón de plenos do Concello». García resaltó que «ademais de profesores e alumnos universitarios de química, houbo tamén docentes doutras disciplinas como a bioloxía e as matemáticas, e tamén rapaces de instituto con interese na materia».
García explicó que el presente era un año especial para la disciplina «polo centenario da concesión do Premio Nobel a Marie Curie e por ser declarado o Ano Internacional da Química». Por este motivo, la organización consideró que, aprovechando la fecha, sería positivo «realizar un foro de debate e reflexión no que se puxesen de manifesto distintas perspectivas sobre esta ciencia», con el fin de «achegarse ó maior número de público posible».
Uno de los principales focos del curso centró la reflexión en la perspectiva que los ciudadanos tienen de la química. García afirma que «normalmente hai unha visión pesimista e negativa, que concibe a química como algo perigoso».
Los participantes del taller debatieron acerca de la relación de la ciencia química con los medios de comunicación, analizando diversas noticias aparecidas en los periódicos y comprobando el enfoque de las mismas.
Para García, «habitualmente faise fincapé nos aspectos negativos da química, como a contaminación». La docente considera que «é fundamental cambiar esta perspectiva, xa que a química é tamén un recurso fundamental no benestar social. Só cabe pensar na cantidade de medicinas ou novos materias protagonistas do desenrolo tecnolóxico que dependen dela», explica. Esta cuestión «é traballo noso, dos profesionais da química».
Enfoques
Además de reflexionar sobre la visión social de la química y el proceso de enseñanza y aprendizaje de la materia, el curso impulsó una gran variedad de enfoques.
Los organizadores abordaron la relación de la mujer con la ciencia a lo largo de la historia, habitualmente desconocida, y expusieron la relación entre la química y el arte. Por lejanas que parezcan, estas dos disciplinas, según García, «teñen unha íntima vinculación». Este prisma multidisciplinar sirvió también para celebrar el décimo aniversario de la implantación del bachillerato de artes en el IES Monte Castelo.
