La paralización de las obras de Ponte Ribeira -medida cautelar que acaba de ser ratificada por la Audiencia Provincial de Lugo- llevará a que el Ayuntamiento de Sarria estudie crear un paso provisional en la zona y emprender medidas legales ante los «danos» que provoca que este puente esté cerrado desde hace ya siete meses, afirmó ayer el alcalde, José Antonio García.
Por su parte, la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS) aseguró que todavía no recibió la resolución judicial y que una vez que la tenga la analizará con los servicios jurídicos para ver el plan de trabajo a seguir.
El regidor lamentó que esta situación supondrá un retraso importante para los trabajos de la primera fase del proyecto de encauzamiento del río, que deben estar finalizados en el mes de noviembre. Considera que el corte de la vía, por la que discurre el Camino de Santiago, conlleva unos daños «tremendos», de los cuales «alguén ten que responder». «Non vamos deixar que quede isto así. Dame pena que unha minoría en clave política e ideolóxica estea facendo tanto dano a Sarria», opinó José Antonio García.
Defendió que en Ponte Ribeira no se produjo ningún delito y que el patrimonio de Sarria está «salvagardado» por la Dirección Xeral do Patrimonio y el arqueólogo responsable de la obra.
Calvo Sotelo
Que se mantenga parada Ponte Ribeira también conllevará que las obras en el viaducto de la Rúa Calvo Sotelo no comiencen todavía. Tanto el Concello como la CHMS garantizaron que la actuación en esta última infraestructura no se ejecutará hasta que se abra al tráfico Ponte Ribeira por los problemas de circulación que implicaría tener cerrados dos puentes.
La situación judicial se podría alargar varios meses porque no cabe recurso contra el auto de la Audiencia Provincial y continuará la instrucción. Una vez terminada, se dará traslado a las partes y el tribunal tendrá que decidir si archiva la causa o abre juicio oral.
El alcalde teme que por el retraso en las actuaciones se pierdan fondos europeos destinados al encauzamiento. Además, será «difícil que a CHMS invirta en Sarria ó atoparse con estes problemas», manifestó García, quien denunció el «boicot» a los trabajos. «Levan torpeando un ano e medio as obras», añadió el regidor y acusó a la Plataforma polo Río de «buscar a paralización das obras para danar o Concello e os veciños».
El procedimiento se inició el pasado octubre por una denuncia de la Plataforma por un presunto delito contra el patrimonio histórico al considerar que las obras en el puente supondrían la destrucción de un estribo. Entonces, el juzgado de Sarria decretó la paralización de los trabajos, decisión que fue recurrida por la CHMS.
El tribunal desestimó en noviembre estas alegaciones, por lo que el organismo de cuenca recurrió ante la Audiencia Provincial, que en un auto con fecha del pasado jueves confirmó de nuevo la decisión del tribunal sarriano.
