El Concello retirará el dique del río y la Xunta ve fallos en el estudio ambiental de la CHMS

La administración local se reunió con Inca para eliminar la ataguía a la mayor brevedad, pues tiene que hacerse en estiaje. Conservación da Natureza, que en su día obvió especies, reprocha al ministerio falta de protección
Consolidación del dique, en diciembre del año pasado
photo_camera Consolidación del dique, en diciembre del año pasado

El Concello de Lugo prevé recurrir la sanción de 215.000 euros impuesta por la Confederación Hidrográfica por el dique construido en el río para las obras de la fábrica de la luz, pero acatará la orden de retirada de la estructura, que acaba de ser ratificada por el Ministerio de Medio Ambiente. Técnicos municipales se reunieron este lunes con personal de la empresa adjudicataria de la obra de rehabilitación y de la explotación de la antigua fábrica para preparar la retirada del dique.

El gobierno local quiere que el proceso vaya lo más rápido posible, ya que juega con el condicionante de que los trabajos tienen que hacerse con el río en estiaje. Según las estadísticas de la CHMS, esa condición podría terminar en torno al día 17 de este mes. De hecho, a partir de este martes están previstas lluvias.

La operación necesita de una autorización previa de la CHMS. Una vez se produzca, tendrá quince días para retirar la estructura, cuya colocación comenzó en noviembre del año pasado y fue paralizada por el organismo de cuenca cuando estaba casi finalizada porque, según su tesis, fue realizada unos 150 metros más arriba del lugar donde había sido prevista en el proyecto, que pasó todos los trámites ambientales.

Sin embargo, la Dirección Xeral de Conservación da Natureza acaba de emitir un informe en el que viene a cuestionar la legalidad de esta y otras ataguías que figuran en el proyecto y que no empezaron a construirse precisamente porque, cuando estaban a punto de hacerlo y se hizo el reconocimiento del terreno, el Servizo de Conservación da Natureza de Lugo detectó especies de fauna y flora protegidas. Durante la tramitación de los permisos ambientales, la dirección xeral no había puesto reparos.

El departamento autonómico recuerda en este nuevo informe que la declaración de impacto ambiental aprobada en su día por el ministerio preveía que la mayor parte de las obras se harían desde fuera del río. Hace esa indicación, en concreto, para los trabajos de mayor impacto, "las labores de limpieza y dragado del canal de derivación, así como la instalación de las nuevas turbinas. Ambas actuaciones se realizarán fuera del río Miño". Adega cree que, de esta forma, la Xunta viene a manifestar, de forma indirecta, "a súa nula vontade a legalizar a ataguía parcialmente construída ou outra que vaia destinada a esa finalidade". Ante esta situación, el colectivo ecologista ha solicitado a la CHMS que archive el expediente de autorización iniciado.

En realidad, este fue construido para reparar el azud, pero Inca preveía utilizarlo también para limpiar y para dragar el canal de derivación.

En este último informe, la Xunta también enmienda la declaración de impacto ambiental porque "a existencia de especies ameazadas levaría implícito a toma de medidas tendentes á súa protección. Estas medidas non aparecen descritas de xeito específico na declaración de impacto ambiental, polo que corresponde unha avaliación destas poboacións e a proposta de medidas correctoras sobre os efectos das obras sobre as mesmas".

En las prospecciones realizadas en septiembre a petición de la CHMS, el Concello e Inca, Conservación da Natureza encontró varios tipos de especies amenazadas o de importancia comunitaria, como dos tipos de moluscos, varias plantas, aves y mamíferos, como la nutria y el desmán. Precisa, además, la posibilidad de que haya otras, puesto que "as mostraxes foron moi lixeiras". Así, propone que se identifiquen y cuantifiquen las especies y se cartografíe su distribución.

Adega considera que ese trabajo debe hacerlo la Xunta, no por el promotor de las obras. Además, cree que queda patente que la declaración de impacto ambiental no garantiza la protección de los valores del río, por lo que ha solicitado a la CHMS y al Concello que inicien el procedimiento de modificación de la misma. Se ampara en el artículo 44 de la Ley de Evaluación Ambiental.

Comentarios