El Concello de Ribadeo limpiará el verdín de la escalinata de As Catedrais

El concejal de Medio Ambiente, Horacio Cupeiro, anunció que actuarán "de inmediato"

Los movimientos de marea de los últimos días han hecho desaparecer parte de la arena de la playa de As Catedrais, dejando al descubierto la totalidad de la escalinata de acceso al enclave que se encontraba oculta bajo la arenilla y ahora está llena de musgo. Este verdín genera un enorme peligro de resbalones para los cientos de turistas que acuden diariamente a visitar el monumento; por este motivo, el concejal de Medio Ambiente, Horacio Cupeiro, anunció ayer que el Concello limpiará «de inmediato» todo el verdín.

«Trátase dun proceso cíclico. Cada certo tempo, xeralmente uns seis ou sete anos, os contínuos movementos do mar provocan que se retire a area, isto deixa ao descuberto zonas que levaban tapadas anos. Deste xeito tamén aparece o musgo, que supón un importante risco de caída», explicó Cupeiro. Desde el gobierno local aseguraron que «inmediatamente acudiremos limpar todo este verdín cun produto especial. As Catedrais é un enclave importantísimo para a Ribadeo, por este motivo debemos coidalo».

La Semana Santa está a la vuelta de la esquina y como todos los años una oleada de visitantes acudirán a conocer el enclave natural ribadese. «Por siso, debemos facer a limpeza canto antes para evitar que alguén poida facerse dano», dijo el responsable de medio ambiente de la villa.

Otro inconveniente producido por los movimientos de arena es que la playa ha quedado también cubierta por un manto pedregoso. «Neste caso debe de ser a propia natureza a que volva colocar a area no seu sitio. Será cuestión de uns días que todo volva á normalidade», dijo Cupeiro. No obstante advirtió a la gente que extreme las precauciones mientras la playa no recupere su curso normal.

ROBO
El bar restaurante ubicado en el entorno natural de As Catedrais sufrió esta semana un robo. Los asaltantes rompieron la persiana y accedieron al local por una ventana. Se llevaron una televisión de gran tamaño, unas cuantas botellas de bebida y las monedas del teléfono.

El propietario, que ya ha presentado la denuncia pertinente, estaba preparando todo para reabrir el establecimiento de cara a esta Semana Santa.

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