El alcalde de Lugo, José López Orozco, informó este viernes de la convocatoria de una reunión el próximo miércoles sobre seguridad en el casco histórico de la ciudad, a raíz del atropello mortal de un hombre de 79 años el pasado lunes, cuyo autor aún no está identificado. El regidor añadió que el gobierno local está dispuesto a contemplar nuevas medidas de control.
En la reunión participarán los presidentes de la Federación Galega de Comercio, LugoCentrum, Lugo Monumental y Asociación de Empresarios de la Hostelería, además de técnicos del Ayuntamiento y de la Policía Local.
Precisamente, este mismo viernes el BNG anunció que presentará varias iniciativas en el Ayuntamiento de Lugo para que se aclaren "ciertos aspectos" relacionados con el atropello, que ocurrió en una zona restringida para peatones y vehículos autorizados.
En todo caso, el regidor socialista aclaró que el equipo de gobierno ya trabajaba en esta cuestión antes de producirse el atropello. "Tuvimos una reunión el equipo técnico y político para estudiar cómo podemos mejorar la circulación en la zona peatonal", apostilló.
Orozco reconoció estar dispuestos a contemplar nuevas medidas. "Por eso convocamos esta reunión, con el fin de llegar a un acuerdo que permita tener el centro histórico en mejores condiciones", abundó.
La portavoz del BNG, Paz Abraira, recordó que se trata de "una zona peatonal, en pleno centro del casco histórico y con un acceso restringido que debería estar controlado". Para los nacionalistas, resulta "absolutamente dramático que en una ciudad como Lugo, con un casco histórico peatonalizado, no exista mayor seguridad para evitar sucesos que no tienen justificación en una zona con tráfico restringido", por lo que pide que el Ayuntamiento "adopte todas las medidas necesarias, y de manera urgente, para que esta situación no se repita".
Abraira reiteró que "el gobierno municipal tiene que darse cuenta de una vez de que las zonas peatonales son para las personas y no para los vehículos".
