El área recreativa de Gontán, en Abadín, acogió ayer una jornada dedicada al agua en la que participaron los niños del campamento de verano organizado por el Concello por segundo año consecutivo en el mes de agosto.
Un total de 24 excursionistas, de cuatro a 14 años, pudieron disfrutar de una aventura diferente. Por la mañana, siguieron el ‘Rastro del Tesoro’ por todo Abadín, un juego que consistía en encontrar una bolsa de caramelos.Tras comer a orillas del río, los niños dedicaron la tarde a hacer una ginkana con actividades en el agua.
En la jornada de hoy, los niños y niñas del campamento se desplazarán hasta la playa lucense de A Rapadoira, en Foz, para disputar un torneo de castillos de arena. Ya por la tarde, los jóvenes podrán divertirse en el mar.
El campamento de verano, que se prolongará durante todo el mes de agosto, de lunes a viernes y de 10.00 a 13.00 horas, hace horas extras esta semana, ya que los niños disfrutan de unas sesiones especiales de juegos en un horario ampliado hasta las 19.30 horas.
Los cuatro monitores del campamento ya acompañaron y colaboraron con los niños en actividades como los talleres de robots, juegos populares, bailes de salón, senderismo o teatro.
Las propuestas con más éxito fueron la globoflexia, la papiroflexia o los juegos olímpicos y paralímpicos, junto con el día de las olimpiadas, cuando un grupo de peregrinos canarios se animaron a jugar con los niños en diversas actividades. Además, los menores tuvieron la oportunidad de elegir al presidente del campamento.
La jornada del viernes estará dedicada a la preparación y decoración de la fiesta de despedida, a la que también asistirán los padres de los niños. Durante el acto, los niños ofrecerán bailes y espectáculos musicales y recibirán las orlas. La celebración también contará con una fiesta de la espuma y una discoteca móvil.
Los niños y niñas que participan en el campamento de verano del Concello de Abadín proceden, además del propio municipio, de otros limítrofes como Cospeito y Vilalba e incluso de África, ya que un menor saharaui también disfrutó de los juegos y actividades durante dos días.
