El Camino de Invierno, una ruta de peregrinación a Santiago que atraviesa la Ribeira Sacra desde Quiroga hasta Chantada, era la elegida antiguamente por muchos peregrinos que partían de Ponferrada para evitar encontrarse con el dificultoso paso de las cumbres nevadas de O Cebreiro. La ruta, que antes de adentrarse en las tierras del sur de Lugo pasa por la comarca ourensana de Valdeorras, ha resurgido y cada vez son más las personas que optan por seguirla, ya no solo en los meses más fríos del año, sino también en primavera y verano, cuando los parajes naturales de la Ribeira Sacra están en todo su esplendor.
Puesta en valor por la asociación Camiños a Santiago pola Ribeira Sacra en 1999, ha ido cogiendo adeptos poco a poco hasta contabilizarse el pasado año una nada desdeñable cifra de 2.000 peregrinos, que en vez de coger el Camino Francés se desvían en Ponferrada para seguir el sendero que discurre prácticamente paralelo al cauce natural que marca el río Sil.
