El Breogán sale con las cartas boca arriba

El conjunto lucense inicia este sábado ante el Río Ourense un temporada en la que se ha marcado la meta del ascenso

El futuro, ahora, también juega en contra. La carrera del Cafés Candelas Breogán por retornar a la máxima categoría del baloncesto español se acelera. No queda más remedio. La aprobada reducción de equipos en la Liga ACB y la previsible y más o menos inmediata limitación en el número de ascensos desde la LEB a uno solo, va a convertir la competición de la FEB en un pozo del que será casi imposible salir. Por eso, no es una temporada cualquiera la que empieza este sábado para el Breogán.

Nadie puede garantizar un ascenso, y menos cuando ni siquiera se maneja ninguno de los tres o cuatro presupuestos más altos, pero la obligación del Breogán es luchar por él porque, con todo, tiene mimbres para lograrlo. Desde el consejo de administración no se esconde cuál es el objetivo y tampoco lo ocultan los miembros de la plantilla. Hay que luchar desde el primer al último partido porque no solo es el ascenso, a lo mejor en esta temporada también se juega el futuro del club. Y esa lucha empieza este sábado. Y además lo hace con un derbi.

El Pazo dos Deportes vuelve a abrir las puertas a las 20.00 horas para el primer encuentro de la temporada. El Río Ourense es el rival y el primer obstáculo que los de Natxo Lezkano tienen que superar para no empezar a ceder terreno ya en la línea de salida de una carrera que se presenta apasionante. El equipo lucense parece haber llegado a la línea de salida en condiciones, al menos por lo visto en los últimos encuentros de una pretemporada que, este año sí, se ha cumplido con absoluta normalidad. Con un único contratiempo, la lesión de Matt Stainbrook que no le permitió jugar en los últimos encuentros, pero también con la nota positiva de que al no cumplirse las previsiones médicas más pesimistas, el pívot estadounidense ya podría reincorporarse al equipo incluso en el encuentro de este sábado.

El Cafés Candelas Breogán se enfrenta a un rival, el Río Ourense que, al menos en principio, parte con un objetivo distinto y menos ambicioso. Pero en una competición como la LEB hablar de favoritos es casi una temeridad, teniendo en cuenta la igualdad que suele distinguir esta competición y más en las primeras jornadas de Liga, cuando los equipos aún están en plena fase de formación.

Lucenses y ourensanos se han enfrentado en dos ocasiones durante la pretemporada y en ambas el triunfo fue para los de Natxo Lezkano: 102-80 en el Torneo Lugo é Básket y 86-64 en la semifinal de la Copa Galicia disputada en Marín, aunque a buen seguro el encuentro de esta tarde no tendrá demasiadas similitudes con aquellos. Entre otras cosas porque el conjunto de Gonzalo García de Vitoria, que empezó muy tarde la preparación, estará mejor preparado, pero sobre todo porque ya podrá contar con el pívot senegalés Abdoulaye Ndoye, con lo que su juego interior será mucho más consistente de lo mostrado hasta el momento.

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