Hacer bolillos relaja la mente, fomenta la creatividad y ayuda a mejorar la psicomotricidad. Son algunas de las ventajas de una laboriosa técnica artesanal que ayer tuvo su máxima expresión en el pabellón polideportivo de O Chanto, donde se reunieron unas 350 personas con motivo de la celebración de la cuarta Xuntanza de Palilleiras Vila de Sarria.
El encuentro contó con la participación de artesanas del encaje llegadas desde Camariñas, Vimianzo, Burela, Viveiro, Cervo, Foz, Quiroga, Monterroso, Miño, Bóveda, Cedeira o Coaña (Asturias), entre otras localidades, invitadas por la Asociación de Palilleiras Camiño de Santiago de Sarria, organizadora de la reunión.
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