EL 9 DE MARZO DE 2008 Zapatero ganaba sus segundas elecciones generales. Los españoles le daban un apoyo sin mayoría absoluta, aupado por los feudos socialistas de Cataluña y Andalucía y los votos de izquierda extrema, como gusta decir a los ideólogos del PSOE al referirse a sus rivales de derechas. Las lecturas de entonces interpretaron que hubo una movilización sin precedentes de multi-izquierda inspirada en el rechazo a la derecha más que en el propio apoyo a ZP.
Zapatero había ganado en 2004 gracias al impacto emocional de los atentados del 11-M. Y entonces, debido a la torpe gestión de un PP noqueado por el zarpazo terrorista, escuchamos como los Rubalcababoys, que conocieron los GAL y a Roldán, daban lecciones de ética y moral al decir que España se merecía "un gobierno que no nos mienta". Tras una primera legislatura dedicada a la fractura social de la "desmemoria" histórica, el pacto antidemocrático del Tinell y una desleal negociación con ETA que fue rectificada tras desorbitados ofrecimientos gracias a las presiones del PP, Zapatero obtuvo la absolución del electorado, se supone que con la lección aprendida. Había pronosticado en la víspera de la voladura de T-4 que estaríamos mejor en la lucha contra el terrorismo un año después, y de esos lodos los polvos del caso Faisán sobre el chivatazo a ETA que, de confirmarse el archivo de Garzón pedido con absoluto desparpajo por la Fiscalía, supondría una maniobra de ultraje al Estado español. Zapatero se había ocupado además de modificar sin consenso y por la puerta de atrás, a espaldas incluso del propio Maragall, el modelo territorial español y sobre todo el Estatut, pendiente de sentencia en el Constitucional.
Pero no contento, el zapaterismo más relicario, volvió a la verdad subjetiva con la crisis y la ley del aborto. Primero sacó del programa electoral de 2008 la modificación de la interrupción del embarazo que finalmente ha realizado con media España en contra y bajo la mentira objetiva de que se hacía para evitar que las mujeres fueran a la cárcel cuando ninguna española ha pisado prisión alguna por abortar. Y después ignoró y negó la crisis ya en plena campaña, con el famoso debate Solbes-Pizarro, y lo siguió haciendo durante nada menos que dos años hasta llegar al segundo aniversario del 9-M. Pues bien, en el ecuador de la segunda legislatura zapaterista, seguimos en el empeño de culpar a los demás del record de paro, tras más de 100 medidas que no han servido para salir de la recesión como todos los países desarrollados de la OCDE y la UE. Y seguimos con una difusa política exterior que bebió del desprecio a la bandera americana para caer en la contradicción del no a la guerra de Iraq y si a la guerra de Afganistán. Una política exterior que pasó de criminalizar el americanismo de Bush a agasajar y babear con el liderazgo planetario de un Obama que, aún siendo progresista, preserva los valores patrióticos de la nación y la bandera, y desconfía del relativismo de Zapatero como se ha comprobado en el desayuno de la oración y la negativa a una cumbre en España para mayor desgloria de su imitador sideral en plena presidencia española de la Unión.
A falta de dos años de mandato, Zapatero aporta como gran novedad una comisión para implicar a los demás en su propia responsabilidad de la crisis, con ticts de dudosa procedencia y apoyos insospechados institucionales que alcanzan a La Zarzuela y llegan hasta la Cámaras de Comercio con su oportuna campaña de "esto sólo lo arreglamos entre todos". Como gran aportación de la zeta para salir de la crisis, la subida del IVA en dos puntos para "pagar a 500.000 parados" a los que ha contribuido el abecedario equivocado de la política económica. Y como glorificación de error continuado, la revelación de que está contento con su Gobierno, desgastado en tiempo record tras una primera remodelación con la salida de Solbes, cooperador necesario del desastre económico desde el felipismo. Es evidente que con este balance, los sondeos dan caía libre al PSOE y descenso de la confianza ciudadana y la credibilidad gubernamental. El avezeta sólo levantará el vuelo con ayuda de una tregua y buena letra en las asignaturas pendientes de la crisis y la política exterior.
| AL CIELO | AL INFIERNO |
| Pérez Touriño | Miguel Bosé |
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El presidente fugaz. Respetuoso adiós para quien fue presidente de los gallegos, y pereció en el intento de una bicefalia imposible. Su renuncia nos devuelve a la vida civil universitaria un profesor de altura, pero nos priva de un político necesario para Galicia. Touriño se va con la cabeza alta. Y en su marcha, defiende la galleguidad de las caixas. |
Torero bandido. Puede que aquel éxito musical y la sangre taurina de Dominguin le hagan buscar estrategias de venta de su nuevo disco. Bosé comparó la represión de la dictadura cubana con la censura de unas fotos sobre el caso Gürtel en Valencia. Mal imitador de Willy Toledo, al que el actor Andy García invita a visitar las cárceles cubanas. |
PRIMERA PERSONA
♦ M. Delibes. Constructor del castellano, "milana bonita" de nuestra literatura.
♦ F. Antich. Gobernó con Unión Mallorquina pese a la corrupción. Y sin regeneración democrática, volvió a pactar con el mismo partido para seguir en el poder de Baleares.
♦ Juan José Cortés. El padre coraje de la niña la Mari Luz se dio de baja en el PSOE por desconfianza.
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CHISMES
♦ Gestiones desesperadas. Dicen que Moncloa trabaja en una posible nueva tregua para antes de las elecciones de 2011. ETA trataría así, dicen los analistas, de que "Zapatero no se hunda", pues sería más fácil arrancar cesiones al PSOE que al PP.
♦ Remodelación. Zapatero no festejó su victoria electoral de 2008. Tampoco esta vez hubo guateque socialista porque "no está el horno para bollos". Aunque ZP dice no tener "prevista" una remodelación, todos tienen la mosca tras la oreja con vistas a la Semana Santa.
♦ "Por qué no te callas". Se lo dijeron a Corbacho al aconsejar planes privados de pensiones. Alguien le obligó a matizar en el Senado, porque hace nada había puesto a parir al PP por eso mismo.
