Después de buscar con algo de curiosidad entre las viejas botellas que se guardan en la bodega familiar, cierro la puerta y subo despacio las escaleras hasta llegar a la cocina. Nuestro vino de hoy es algo mayor y por eso debemos tratarlo con cuidado, sin darle grandes sobresaltos.
Sin hacer movimientos bruscos retiraremos la cápsula de antiguo plomo, seguidamente introducimos el sacacorchos. Una vez retirado el corcho observamos las evoluciones del vino en ascendencia, así como su olor y color.
Ayudados por un decantador, oxigenaremos este vino que lleva en el recipiente más de veinte años y puede estar bastante cerrado, también evitaremos con esta práctica servir algún que otro sedimento. Mientras decantamos el vino podemos reconocer algunos aromas que se volatilizan, en este caso aromas licorosos de guindas.
CATA
Aunque probablemente ya haya perdido mucha de su viveza, presenta un color rojo picota, apagado, transparente y límpido. La fruta ha desaparecido casi totalmente y predominan los que se conocen como aromas terciarios, que son los que vienen del envejecimiento y la evolución: son aromas a cuero, a especias y maderas nobles. El cuerpo del vino es muy fino y delicado, pues ya no hay esa potencia de los caldos jóvenes, la astringencia casi ha desaparecido y el líquido resulta sedoso y aterciopelado en el paladar.
Zona Bodega El Coto. D.O. Rioja Alavesa. Cosecha 1987. Uva 100% tempranillo. Maridajes Magret de pato con cebolla confitada y manzana. Grado 12,5% vol. Temperatura de consumo aconsejada 15-17º.
