Currás anuncia la remodelación del Ejecutivo compostelano

El alcalde de Santiago, Ángel Currás, ha dado hoy a conocer la remodelación total de la estructura de su gobierno, aunque la oposición ha insistido en que debe renunciar él, a causa de su imputación en la operación Pokemon, que investiga una supuesta trama de adjudicaciones irregulares.

Currás anunció esta mañana una redistribución de las competencias municipales entre sus concejales, días después de que renunciase el edil de Movilidad, Albino Vázquez, imputado, en la operación Manga, derivada de la Pokemon, y que eludió la cárcel tras pagar una fianza. Además, en el Gobierno municipal se produjo recientemente la baja de la concejal Paula Prado, elegida recientemente portavoz del PP de Galicia.

El alcalde justificó la nueva estructura del Gobierno local en la búsqueda de una mejora en la gestión y agregó que establece mayor servicio al ciudadano, al tiempo que negó las críticas del BNG, cuyo portavoz, Rubén Cela, sostuvo que la remodelación premia a los ediles afines a Currás y pone bajo "tutela" a los que no lo son.

Ángel Currás, además, preguntado por la petición de dimisión que formularon tanto el BNG como el PSdeG, recordó que el anterior alcalde socialista, Xosé Sánchez Bugallo, y un edil de su grupo estuvieron imputados unos meses, en un caso que finalmente fue sobreseído, y entonces no solicitaron su renuncia. Además, respecto a la dimisión esta mañana del alcalde de la localidad gerundense de Sant Hilari y presidente del Consejo Comarcal de la Selva, Robert Fauria (CiU), señaló que se trata de "otro grupo político" y señaló que, en su caso, había "medidas cautelares". Por ello, subrayó que, "evidentemente" no ve paralelismo con su caso, porque "hay medidas cautelares''.

El nuevo Gobierno local se estructurará en siete grandes áreas y pretende garantizar la gestión "con mayor eficacia", destacó Currás, que dijo haber apostado por un modelo de gestión para "racionalizar" su estructura y que da respuesta a objetivos del anteproyecto de la reforma de la ley de administración local.

El alcalde restó trascendencia al hecho de que dos de los integrantes de la lista del PP en las municipales decidiesen no acudir al Ayuntamiento para cubrir la baja del edil dimitido, puesto que, subrayó, ambos tienen obligaciones laborales que no les permitirían acceder a las tareas municipales.

Respecto a las palabras del nacionalista Rubén Cela, que habló de que con la remodelación se penaliza a los ediles que no son afines al alcalde, Currás subrayó que la remodelación sólo trata de racionalizar la gestión pública, mientras apuntó que el Gobierno de coalición de las pasadas legislaturas era "un reparto de poder" entre socialistas y nacionalistas.

Igualmente, defendió la unidad del Gobierno local y, frente a las críticas del BNG a que el gobierno se ha hecho en función de afinidades políticas, dijo que el problema del Bloque es que tiene tres concejales "y tres facciones distintas, pero en el PP hay un único grupo" que le llevó a ganar las elecciones, concluyó.

Previamente a la comparecencia del alcalde, el portavoz del PSdeG, Francisco Reyes, subrayó que su grupo, por responsabilidad, está dispuesto a colaborar para que no se den por perdidos los dos años que restan de gestión municipal, si bien destacó la necesidad de que el alcalde renuncie. Para Reyes, no es posible una "regeneración ética" en el Ayuntamiento compostelano si se mantiene el alcalde actual e indicó que, "desgraciadamente" hace ya tiempo que Currás toma decisiones "muy enfocadas" a tratar de permanecer en el cargo.

Por ello, reiteró que este es uno de los motivos por los que debería hacer "un servicio a la ciudad y renunciar, porque uno puede no ser un buen alcalde, pero siempre está a tiempo de ser un muy buen vecino". Mientras, el portavoz nacionalista reiteró la postura de su grupo de que es preciso que dimita todo el Gobierno municipal y que se convoquen elecciones anticipadas

Rubén Cela insistió en que la remodelación "puede que le interese a Currás", pero no a la ciudad, e indicó que la situación es tan grave que no sirve una operación "de maquillaje" o con "un parche", sino medidas "excepcionales y contundentes". El dirigente nacionalista, además, destacó que la única remodelación posible es el cambio de todos los concejales del grupo de Gobierno, que está "deslegitimado" para seguir al frente de la gestión.