La Asociación Galega de Pais e Nais Separados (Agpns) denunció la "pérdida de relación" de un padre, José Luís Pallares, y su hija, residente esta última en Monforte de Lemos (Lugo), después de que el juzgado de primera instancia número 2 haya decidido "suspender" las citas entre ambos, tras no poder recogerla del Punto de Encuentro Familiar por "mostrarse muy nerviosa" y asegurar "no querer ir con su padre".
Así, la asociación explica este sábado, a través de un comunicado, que cuando el padre, residente en Vigo, acudió al Punto de Encuentro Familiar en Ourense para recoger a su hija adolescente alrededor del 15 de agosto y pasar juntos el resto del verano, la encontró "muy nerviosa". La entidad puntualiza que, a excepción de los períodos vacacionales, padre e hija "sólo pueden relacionarse" cuatro días en fines de semana durante el mes.
Según el comunicado, los técnicos del centro afirman que la niña alegó que su padre le reñía por "determinados comportamientos de rebeldía", como colgarle el teléfono, por lo que el progenitor "le quitaba el móvil como castigo".
Como consecuencia, el citado juzgado decretó la celebración urgente de una vista, solicitada por la Fiscalía, para esclarecer lo sucedido.
La organización mantuvo una reunión el pasado jueves con José Luís Pallares y sus familiares y anuncia que ahora iniciará una serie de actos para "ayudar a buscar una solución" lo más adecuada posible para este caso concreto, y también para "miles de situaciones semejantes" que conforman un "problema social escondido". Este mismo lunes piensa entrevistarse con el fiscal jefe de la provincia de Lugo e intentará mantener un encuentro con la fiscal y la juez que llevan este asunto en concreto.
La entidad sostiene que los juzgados de Monforte y el Punto de Encuentro Familiar no incentivan la búsqueda de alternativas, sino que "se desentienden" del problema, derivando "en exclusiva" el cuidado de la hija a la persona que tiene la custodia.
La Agpns aprovecha para denunciar la "falta de coherencia y determinación" de muchos juzgados y puntos de encuentro para cumplir con su obligación legal de impedir los abusos de la patria potestad del progenitor custodio. Subraya que "todos" los estudios psicológicos, pedagógicos y sociológicos demuestran que los niños que sufren esta situación quedan "más expuestos" a todo tipo de riesgos de comportamientos antisociales, patológicos e incluso delictivos.
