La autovía del Noroeste (A-6) permaneció ayer más de dos horas cortada en O Corgo, en sentido a A Coruña, a consecuencia del accidente de un tráiler, que hizo la tijera en la calzada.
El siniestro ocurrió a las 11.30 horas de la mañana. El conductor del camión perdió el control del vehículo al reventarle una rueda, cruzándose en la calzada, de forma que la cabina tractora del vehículo articulado y el remolque formaron un ángulo de 90 grados. La cabina impactó contra la bionda de protección del lado derecho de la autovía, destrozándola a lo largo de 150 metros.
Pese a la espectacularidad del accidente, el conductor del camión, Néstor Robalmo, ecuatoriano de 33 años, no resultó herido. Afortunadamente, cuando el tráiler perdió el control no había tráfico en ese punto de la autovía del Noroeste.
La A-6 permaneció cortada dos horas y 20 minutos, hasta las 13.50 horas, en un trayecto de 10 kilómetros, desde la estación de servicio de Gomeán hasta la salida de Vilartelín (Baralla). La Guardia Civil de Tráfico estableció desvíos alternativos por la N-VI desde Baralla hasta pasada la gasolinera de Gomeán y reguló la circulación para evitar retenciones.
El camión articulado había partido de Murcia, cargado con tres contenedores metálicos para el transporte de productos reciclados, y se dirigía a Lugo. La carga, que no llegó a volcarse, pesaba 3.000 kilos, según dijo el chófer.
La retirada del camión se produjo en dos tiempos. Primero, una grúa de grandes dimensiones cargó la cabina del tráiler en otro vehículo articulado. Posteriormente, una cabeza tractora de la empresa de grúas se llevó el remolque con los contenedores, quedando la vía expedita.
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El CONDUCTOR |
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El conductor del tráiler, el ecuatoriano Néstor Robalmo, describió así el accidente: «Una rueda reventó y ya no tuve control del vehículo. Sucedió en segundos y sólo esperas que pare el camión. Estás agarrado al volante y aguardas a que se detenga». «No estoy bien» El conductor del tráiler reconoció que había pasado miedo y que todavía «no estaba bien» una hora después del siniestro. «Llegué a pensar lo peor. Quedas asustado». El joven de 33 años lleva trabajando de chófer desde hace cinco años y reside en España desde hace 11. Su empresa es de Albacete. |
