"Coñecían ben o sitio"

Los vecinos asaltados en su casa de Guxeva, en Chantada, dijeron que los cacos les preguntaron por el dinero de una venta de vino ►Tanto el Concello monfortino como el de Sober tienen diez días para alegar ►Otra explotación ampliará sus instalaciones para sacar al mercado unas 785 toneladas anuales de carne de pavo
La casa asaltada en Chantada, con varios vecinos fuera
photo_camera La casa asaltada en Chantada, con varios vecinos fuera

Cuatro personas encapuchadas, con ropa juvenil y hablando en gallego. Es parte de la descripción hecha por las víctimas del robo sucedido el pasado jueves, alrededor de las diez de la mañana, en una casa de la parroquia de Santiago de Arriba (Chantada). Los ladrones entraron mientras el matrimonio de octogenarios que reside en la vivienda desayunaba. Tras atarlos, se llevaron 15.000 euros.

Los hechos ocurrieron en Guxeva, un pequeño núcleo de población apartado un par de kilómetros de la carretera que circula desde Chantada hasta Nogueira, muy cerca de la bodega Condado de Sequeiras. Los dos vecinos asaltados son los únicos que habitan actualmente en una de las casas del lugar. Dos de sus tres hijos pernoctan allí, pero en el momento del asalto los mayores se encontraban solos.

Las víctimas apuntaron que los ladrones, que iban encapuchados, vestían ropa juvenil y hablaban entre ellos en gallego

"Quen fixeron isto coñecían perfectamente o sitio e tiñan todo preparado", indicó un hombre que acudió a interesarse por el estado de sus vecinos. Esta conclusión la facilita el hecho de que los ladrones llegaron a la vivienda solo unos cinco minutos después de que la hija del matrimonio hubiera salido con su vehículo hacia Monforte, donde trabaja.

Las víctimas relataron a este medio que una vez dentro del inmueble los ladrones les preguntaron por el dinero resultante de una importante y reciente venta de vino. Ya entonces habían inmovilizado al matrimonio, además de cortarles la línea telefónica.

El hombre narró cómo intentó hacer frente a los intrusos con una navaja que llevaba encima cuando se produjo del incidente. El portador de la escopeta se la tiró al suelo con la culata y acto seguido procedió a atarlo, tanto a él como a su esposa.

Ninguno de los dos octogenarios sufrió agresiones físicas, pero están muy asustados por lo ocurrido. "En máis de 80 anos vivindo en Guxeva nunca tal cousa vira", comentó el vecino asaltado. Él y su mujer fueron encontrados en estado de shock por uno de sus hijos, que dio la voz de alarma.

Este tipo de incidentes han sido relativamente frecuentes tanto en Chantada como en el resto de la comarca en los últimos años. Los ladrones suelen operar en poblaciones rurales cuyo número de habitantes se ha visto muy reducido y en casas grandes y solitarias, normalmente habitadas por gente mayor que rechaza mudarse a un núcleo urbano. Hasta el pasado jueves, el último robo con violencia había tenido lugar el pasado marzo en Fontemaior (Sober). En Chantada, un caso muy sonado ocurrió en A Veiga en el 2009. Nueve miembros de una banda entraron en una vivienda y robaron 400 euros, varias joyas y cuatro móviles tras amenazar a una mujer y sus dos hijos.

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