Una pareja de jóvenes mariñanos fue condenada este lunes tras reconocer su participación en la sustracción de una niña de dos años en Ourol, en 2015. La pequeña era la hija de la chica y vivía con su padre y sus abuelos paternos, cuya casa asaltaron con violencia para llevarse a la niña.
La Audiencia Provincial celebró este lunes la comparecencia por estos hechos, en la que la Fiscalía llegó a un acuerdo con los acusados para que estos se declarasen culpables y pudieran ver rebajadas las altas penas de prisión a las que se arriesgaban. El ministerio público solicitaba en su escrito de acusación seis años de cárcel por los delitos de allanamiento de morada en concurso con otro de sustracción de menores, uno de más de lesiones y otro de daños.
Finalmente, la condena se limitó a un año de prisión para cada uno, que en el caso del joven, J.M.C.B, será en un centro especializado en enfermedades mentales. Además, la mujer perderá durante ese año la patria potestad sobre su hija y ambos tendrán que mantenerse alejados de sus víctimas durante cinco años. Por último, deberán afrontar el pago de una multa de 1.080 euros cada uno, además de 3.441 euros al abuelo de la pequeña por las lesiones, 522 al Sergas por la atención médica y otros 200 por los desperfectos causados en la vivienda. Con esta solución estuvo también de acuerdo la abogada de la familia paterna de la niña.
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