Condenado a ocho años de prisión por violar y coaccionar a un menor en Lugo

El procesado, un exvoluntario de Protección Civil, ya había sido condenado a ocho años de cárcel en 2013 por unos hechos similares

La sección segunda de la Audiencia Provincial de Lugo ha condenado este lunes a un varón a ocho años y cinco meses de prisión por violar y coaccionar a un menor en Lugo en 2010. Se trata de un exvoluntario de Protección Civil que ya había sido condenado a ocho años de cárcel en 2013, cuando tenía treinta años, por unos hechos similares. 

 La nueva sentencia, remitida por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, le impone ocho años por el delito de violación y otros cinco meses por las coacciones, en ambos casos con la circunstancia modificativa atenuante de dilaciones indebidas, mientras que lo obligan al abono de 13.000 euros a la víctima. Los hechos probados de la resolución judicial recogen que el procesado tuvo varios encuentros con la víctima, un joven de dieciséis años, aunque en ningún caso con relaciones sexuales que acabasen en penetración.Sin embargo, en un momento dado, el condenado manifestó su interés en que su relación pasase a ser sentimental, mientras que el joven no quería, por lo que este dejó de contestar a sus llamadas y mensajes.

Meses más tarde, en verano de 2010, este menor accedió a ir al domicilio del procesado, donde "empezaron a besarse y a tener contacto físico". En un momento dado, el joven intentó pararlo, pues no quería pasar a mayores, pero el condenado continuó y lo forzó a practicarle sexo oral.

Al terminar la relación sexual tomó varios fotografías del menor desnudo, a pesar de que este le pidió que las borrase, y el vínculo volvió a romperse durante semanas. En octubre, el condenado envió un mensaje a la víctima con la amenaza de que si no retomaban el contacto, haría públicas las fotografías: "O koges el mvl o pongo tus fotos en internet y x todo Lugo (sic)", dijo.

A raíz de estos hechos, el menor estuvo durante ocho meses encerrado en casa y dejó los estudios, pues quedó afectado psicológicamente por lo ocurrido. Durante el juicio oral, celebrado el pasado 19 de julio, el acusado se acogió a su derecho a no responder a ninguna de las preguntas formuladas.

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