Condenadas tres personas por una pelea a botellazos en un bar de Sarria en 2013

Los acusados aceptaron penas que suman cuatro años de prisión. El fiscal retiró los cargos contra uno de los procesados

Dos hombres y una mujer aceptaron este martes en el juzgado de lo Penal número 1 de Lugo condenas que suman cuatro años de prisión por una pelea a botellazos ocurrida en el año 2013 en un bar de la localidad de Sarria. Por estos hechos, fue procesada una cuarta persona, para la cual el fiscal solicitaba en principio una multa por una falta de lesiones, aunque finalmente retiró la acusación.

El incidente se produjo a las cinco de la mañana del día 23 de marzo de 2013, en un local de ocio nocturno de Sarria, donde los acusados iniciaron una discusión entre sí y, "guiados cada uno de ellos por el ánimo de menoscabar la integridad física del otro", se agredieron, señala el fiscal.

En el transcurso de la pelea emplearon botellas, que se lanzaron mutuamente y a causa de las cuales todos resultaron con lesiones, por las que precisaron atención médica y la aplicación de puntos de sutura, quedándoles como secuelas varias cicatrices. Tres de ellos tardaron en curar 8 días y el cuarto, 99.

DAÑOS EN EL LOCAL. La acusada R.H.M.A. aceptó sendas penas de un año de prisión por dos delitos de lesiones. El varón R.M.C.P. fue condenado a un año de cárcel por un delito similar, así como a una multa de tres meses a razón de tres euros diarios dado que, antes de la pelea, rompió numerosas botellas de alcohol en el establecimiento, ocasionando un perjuicio al hostelero valorado en 500 euros.

El tercer acusado, M.L.R., se conformó con un año de prisión por otro delito de lesiones. En el caso de M.M.R., el ministerio público retiró el cargo que pesaba sobre ella.

En el apartado de indemnizaciones, la más cuantiosa es de 3.450 euros, cantidad con la cual el fiscal solicita que R.H.M.A. indemnice a otro de los implicados en la pelea por las lesiones que sufrió.

El Sergas también reclama por la atención médica prestada a los heridos, la cual asciende en el caso más grave a 1.500 euros.

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