Complicado rescate de una senderista andaluza en un terraplén en A Pontenova

Varios efectivos de emergencias se alternaron para mover la camilla en un lugar desde el que la señal del GPS localizador no se percibía
Vista de parte de la ruta de A Seimeira, en Sanxés
photo_camera Vista de parte de la ruta de A Seimeira, en Sanxés

Una pareja de senderistas andaluces que emprendió el pasado sábado, a primera hora de la tarde, una de las rutas más atractivas de la localidad pontenovesa, la de A Seimeira, sufrió un percance prácticamente al comienzo de la marcha. A unos 800 metros del lugar donde se suele estacionar el vehículo para iniciar la caminata, la senderista, de mediana edad y de elevada estatura, tropezó y llegó a fracturarse un tobillo. La escarpada orografía complicó su rescate e incluso su localización, puesto que se trata de una zona en la que la señal de GPS del localizador del teléfono móvil se vuelve muy débil.

Su pareja telefoneó de inmediato al teléfono de emergencias 112 desde donde avisaron a los efectivos del Grupo Supramunicipal de Emerxencias (Ges) de A Pontenova en torno a la una y media de la tarde. «Só sabíamos que a persoa ferida era andaluza e que estaba nunha ruta de sendeirismo pola localidade, pero é que hai moitas sendas. Ademais, o sinal do GPS do teléfono do alertante non se percibía así que decidimos ir preguntar á oficina de turismo. Alí nos dixeron que en efecto viñera unha parella de Andalucía e que lles recomendaran facer a ruta da Seimeira de Sanxés. Seguímola e xa ao comezo demos con eles», precisa uno de los Ges pontenoveses que intervino en la asistencia. En un primer momento, se había creído que la accidentada había resbalado y se había quedado al borde de un precipicio pero no fue así; se fracturó el pie izquierdo en un lugar escarpado.

Es un lugar que no está al borde de la carretera. Para llegar a él, es necesario adentrarse por una pista forestal y al finalizarla, se debe estacionar el coche y continuar andando. A casi un kilómetro de distancia del citado aparcamiento encontraron a los senderistas.

La orografía del lugar es escarpada pero los efectivos no llegaron a usar ni arneses, ni cuerdas para sujetarse a sí mismos e ir en busca de la persona herida.

Sí tuvieron que ir en fila "de a uno" y en vez de levantar el equipo y trasladarla entre cuatro personas, como viene siendo habitual, tuvieron que turnarse entre dos con una camilla de palas.

De ese modo, entre uno de los Ges y un sanitario, pudieron trasladar a la senderista primeramente al todoterreno de la Guardia Civil, cuyos agentes también intervinieron en el operativo, y después a la ambulancia para su posterior evacuación al Hospital Universitario Lucus Augusti.

Al parecer, en torno a las tres de la tarde, la ambulancia salió en dirección Lugo con la senderista accidentada a la que ya le habían colocado una férula en la extremidad lesionada.

Quienes intervinieron afirman que se trató de un mero accidente, concretamente por un resbalón, porque las sendas pontenovesas recomendadas para iniciados responden a recorridos sencillos. Por eso, los expertos recomiendan sobre todo llevar un calzado apropiado. Además de los cuatro Ges, miembros del 061 y dos guardias ayudaron dos vecinos de Sanxés.

Comentarios