El recinto ferial de Gontán volvió a ser, un año más, un hervidero de gente que se acercó hasta esta localidad del municipio de Abadín para disfrutar de una animada jornada de la tradicional Feira de Santos, donde se dieron cita, además de cientos de visitantes, decenas de puestos de venta de artículos de todo tipo y de animales para el habitual mercado de ganado.
Le costó arrancar, a pesar de que el día amanecía sin agua, a diferencia de las anteriores ediciones, en las que la lluvia fue el invitado de excepción. Aunque la feria de ganado y los puestos ambulantes podían verse temprano, el público tardó en aparecer por las calles de Gontán. Eso sí, cuando lo hizo fue para llenarlas y darle a esta tradicional cita del otoño chairego el empaque que se merece.
