Centenares de gallegos protestan en O Hórreo contra unas cuentas para 2015 que ''consolidan los recortes''

Centenares de personas se han manifestado esta mañana en Santiago, convocados por la Plataforma Galega en Defensa dos Servizos Públicos, para protestar contra los presupuestos de la Comunidad Autónoma de 2015 aprobados por el PP en el Parlamento y que, dicen, "consolidan los recortes".

Los portavoces de las cuatro organizaciones sindicales con representación en la Administración pública -Comisiones Obreras (CC OO), Unión General de Trabajadores (UGT), Confederación Intersindical Galega (CIG) y Central Sindical Interdependiente y de Funcionarios (CSIF)- han coincidido en denunciar que el Gobierno gallego aumenta las diferencias salariales y sociales de los empleados públicos y deja la tasa de reposición en el 50 por ciento.

Bajo el lema En defensa de los servicios públicos, no a los recortes de nuestros derechos y con consignas como, Traballo digno, na nosa terra, Hai que recortar ó Partido Popular o Feijóo, cabrón, recórtate os collóns, centenares de personas se han congregado a las puertas de la Cámara gallega, donde hoy se debatieron y aprobaron las cuentas para el próximo ejercicio.

En declaraciones a Efe, el representante de UGT, José Vázquez, ha asegurado que la Xunta continúa con unos presupuestos "restrictivos", mientras que las otras Comunidades Autónomas y el Gobierno central pagan "el cien por cien de lo devengado". "Somos la única autonomía que queda ahora recortando el específico de la paga extra, que viene siendo un cuarenta por ciento. Somos los únicos", ha reiterado. Asimismo, ha lamentado que no se cubra el cien por cien de la reposición de las plazas de jubilados, ya que se sobrecarga a los trabajadores y se generan más bajas.

Por su parte, la coordinadora de la CIG en el área pública, Carmen López, ha subrayado a Efe que este rechazo conjunto se debe a que los presupuestos presentados "profundizan" en el poder adquisitivo y en las diferencias salariales, con respecto a otros trabajadores públicos. "En el 2014 la pérdida del poder adquisitivo es de un 30 por ciento y mantener estos recortes para el año 2015 es aumentar ese 30 por ciento y ahondar aún más en la brecha salarial", ha explicado.

Para López, es "imperdonable" que se mantenga una tasa de reposición cero en casi todos los servicios, a excepción de sanidad y salud y fuerzas de seguridad, ya que esto provocará una "desaparición, externalización y privatización" de los servicios públicos, que responde a "la estructura y a la ideosincrasia" de la "política con mayúsculas" que aplica el Partido Popular.

En declaraciones a Efe, el responsable del área pública de CC OO, Ramiro Otero, ha afirmado que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, "vulnera" la negociación con los empleados públicos al aplicar "por decreto y por mayoría en el Parlamento" unos recortes que "perjudican el Estado del Bienestar en Galicia". "Pasan el rodillo en la aprobación en el Parlamento", ha puntualizado Otero, quien ha denunciado que el PP miente para mantener unos recortes y una política de derechas que repercute en la ciudadanía. No obstante, ha observado que, de seguir en esta línea, continuarán con las movilizaciones reivindicativas para dejar patente que no están de acuerdo con unas modificaciones que se hacen "unilateralmente" y al margen de los trabajadores públicos.

Por último, el responsable de acción sindical de CSIF Galicia, José Sánchez, ha avanzado a Efe que estas disminuciones salariales y laborales provocarán "una merma" en la prestación y en la calidad de los servicios que los empleados prestan a la ciudadanía, con el único fin de "justificar la externalización". Así, ha indicado que mientras "alardean" de la situación económica de la Comunidad gallega, realizan contratos con "empresas privadas, que además, si se investigan, tienen nombres y apellidos vinculados con el Gobierno del Partido Popular". "Para eso no hay que ser muy listos", ha apostillado. Así, ha concluido que el anuncio de restablecer el cien por cien de las pagas para el año 2018 es "vender humo" y prometer algo, que seguramente, no se podrá cumplir con el único fin de tener "efecto electoralista" y calmar "el cabreo" de los trabajadores públicos.

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