Los niños fueron los protagonistas de la última jornada de la Festa Castrexa de Burela, en la que pudieron disfrutar de diversos juegos en la Praza do Concello. Además continuó abierto el mercado y hubo espectáculos de animación hasta la medianoche para poner el broche final a esta quinta edición.
Monitores de IG10, O Rincón do Trasgo y Taravás dirigieron las actividades infantiles, en las que participaron una veintena de niños, que hicieron carreras de sacos, lanzamiento de pacas o tiro de cuerda, entre otras, y disfrutaron además de una merienda.
El Mercado Castrexo también estuvo abierto este domingo con sus puestos, en los que se podían encontrarse todo tipo de artículos artesanales, desde jabones a bisuterías, comida o mojitos, y además continuaron las actividades de animación circenses y musicales. También recorrieron las calles de Burela un día más los faunos y hubo otros espectáculos como acrobacias en un gran trapecio. Por otro lado, vecinos y visitantes pudieron probar de nuevo las tapas y menús de inspiración castrexa que sirvieron trece locales hosteleros.
La organización, a cargo de la Asociación de Comerciantes, Industriais e Autónomos (Acia), hace un balance muy positivo de esta quinta edición por la alta participación, teniendo en cuenta que coincidía con otras citas con gran tirón en la comarca, como el Mercado Renacentista de Viveiro o las fiestas de Lieiro en el vecino Cervo.
El presidente del colectivo de comerciantes, Rubén Pinín, cree que fue un acierto acercar al centro de la localidad las actividades
Uno de los retos para el futuro, según explica el presidente, Rubén Pinín, es implicar a los habitantes de otros municipios cercanos. "O 90% dos que veñen son de Burela e, vendo que cada vez a xente se volca máis e que a festa vai a mellor, queremos convidar aos pobos de arredor, a Foz, Cervo, Ferreira... a que se animen a vir a esta festa que se está consolidando e collendo un nome nas celebracións da Mariña".
ACIERTO. Pinín añade que fue todo un acierto trasladar el grueso de las actividades que se hacían en el puerto a la Praza da Mariña, donde se desarrolló toda la fiesta, a excepción de los juegos castrexos que hubo en la playa. "Concentráronse moitas persoas no pobo e víase mellor ambiente. Ademais a xente está máis na zona de tendas e nos locais de hostalaría, polo que repercute positivamente", explica el presidente de la asociación de comerciantes.
La tesorera del mismo colectivo, Marta Basanta, coincide con Pinín y apunta que "a verdade é que a xente quedou moi contenta co tema de subir a festa, foi a maior felicitación que tivemos porque non había que andar de arriba para abaixo, non facía tanto frío como no muelle e víase máis xente. Foi a primeira festa que se fixo na Praza do Concello e quedou xenial", comentó.
Basanta resalta además la alta participación: "Houbo máis xente que o ano pasado, aínda que os clans foron menos, e todo o mundo o pasou moi ben", dice.
