Los vecinos más jóvenes de Bretoña ya ni lo recuerdan, pero en las inmediaciones de la Casa de Galocha se localizaba el Cristo da Parola, un valioso elemento patrimonial que un accidente de tráfico redujo a añicos a finales de los 80. Casi 30 años después el Concello de A Pastoriza y el artista Fernando Villapol han hecho posible su restauración y regreso al entorno de la plaza, "a escasos metros da que era a súa localización orixinal", según precisó el alcalde, Primitivo Iglesias.
La colocación este viernes en las inmediaciones de la Praza Maior de Bretoña de este cristo, fechado en el año 1886, culminó el proceso de restauración del entorno de la Casa de Galocha o de Falcón, una primera fase de un proyecto diseñado por el Concello que también prevé restaurar el inmueble.
"Os restos do cristo recolléronse e gardáronse nunha casa particular e cando se decidiu acondicionar este espazo, por iniciativa de Villapol e outras personas, tamén se apostou por rehabilitar o cruceiro", explicó el alcalde.
"Eu estaba alí cando o camión rompeu o cristo, vin o accidente e seguín a súa historia", cuenta Villapol, cuyo aprecio por la conservación del patrimonio le hizo proponerse restaurar esta pieza, para lo que contó "co asesoramento de dúas restauradoras, Loli e Isabel, para facelo acorde aos criterios de Patrimonio".
Buena parte de las piezas usadas para recomponer el Cristo da Parola -Villapol dice que se llama así porque la gente se paraba a su lado para hablar- son las originales, pero aún así tuvo que tallar el torso o una parte del fuste que no se conservaban: "Deu traballo e foi un reto, porque a cabeza estaba solta, faltaban pezas... pero eu sufría véndoo tirado e fíxome moita ilusión volvelo a ver colocado".
