Aviones de guerra de origen desconocido lanzaron este viernes varios bombardeos contra posiciones y camiones cisterna de petróleo pertenecientes al grupo terrorista Estado Islámico (EI) en la provincia siria de Deir al Zur (noreste), según activistas.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos precisó que decenas de vehículos del EI que transportaban crudo fueron destruidos en un ataque aéreo en el pueblo de Al Kasra, en el oeste de Deir al Zur, provincia fronteriza con Irak.
Los aviones también tuvieron como blanco el yacimiento petrolero de Al Jarata, al sur de la capital provincial homónima, y unas minas de sal, al oeste, sin que se conozca el volumen de los daños.
Además, las poblaciones de Al Mayadín y Al Bukamal, en Deir al Zur y dominadas por el EI, fueron escenario de bombardeos.
En Al Mayadín, tres aviones efectuaron dos ataques contra una escuela y un edificio de viviendas cerca del hospital Al Said, que causaron la muerte de un civil y heridas a varios.
Esos bombardeos ocasionaron, asimismo, la destrucción de ocho casas y daños en cinco inmuebles, además de destrozos en el colegio.
Asimismo, otro civil pereció en un ataque similar en el pueblo de Al Ashara, en la misma provincia.
Entretanto, la madrugada de este jueves estallaron combates entre los extremistas y los efectivos del régimen del presidente Bachar al Asad en los alrededores del aeropuerto militar de Deir al Zur, que estuvieron acompañados de ataques de aviones de guerra sobre el área de los enfrentamientos.
Al menos ocho efectivos gubernamentales y veinte extremistas perdieron la vida durante los choques y por el intercambio de fuego de artillería y los bombardeos.
La mayor parte de Deir al Zur está en manos del EI, menos barrios de su capital y la base aérea, aún en manos del régimen.
Este jueves, aviones militares, cuya procedencia se desconoce, bombardearon seis yacimientos de crudo en el sur y el este de Deir al Zur.
Los bombardeos contra objetivos petroleros del EI han aumentado tras los atentados de hace una semana en París, reivindicados por los yihadistas, que dejaron 129 muertos y más de trescientos heridos.
