Blanco se compromete a transferir a la Xunta el puerto de San Cibrao

Blanco, en el mitin de Foz. JOSÉ Mª ÁLVEZ
photo_camera Blanco, en el mitin de Foz. JOSÉ Mª ÁLVEZ

El municipio focense volvió a ser el punto de apoyo del socialismo mariñano y el pabellón de deportes de Marzán registró un lleno total para aplaudir al ministro de Fomento, el lucense José Blanco, que se comprometió ante un público entregado a trasferir a la Xunta de Galicia, si ésta lo solicita, la titularidad del puerto de San Cibrao. Un paso que entienden desde las filas socialistas que podría contribuir «a xestionar a apertura ao tráfico comercial de acordo coa empresa concesionaria», reiteró el titular de Fomento.

El acuerdo con la empresa Alcoa que tiene en la actualidad la exclusividad de su uso es vital para poder abrir al tráfico el dique norte, una propuesta en la que todos los grupos están de acuerdo.

El cabeza de lista del PSOE por la provincia eligió la comarca para el arranque de la campaña electoral, con una ajetreada jornada, que comenzó en A Pontenova, donde se reunió con militantes y simpatizantes, a quienes animó a luchar contra las encuestas. El periplo siguió con una comida en el Parador ribadense, un acto más distendido que dejó paso al broche final en Foz, donde Blanco es acogido como en casa.

Un gobierno socialista durante dieciséis años es calado suficiente para que el ministro se rodeara de los suyos, que jalearon su compromiso de «contratar a corredor San Cibrao-Barreiros a finais do ano que ven», una fecha que va irremediablemente ligada a que el PSOE gane las elecciones. Dar la vuelta a las encuestas no solo es posible, según Blanco, sino también deseable, pues «foi este goberno o que subiu un 50 por cento as pensións mínimas que cobran 48.000 lucenses, ou o que implantou a Lei de Dependencia, que hoxe beneficia a máis de 33.000 galegos, ou o que elevou a cobertura pola prestación de desemprego ao seu máximo histórico», recordó entre los aplausos del público.

«Cando Rajoy foi ministro, nin Lugo nin Galicia existían», aseveró Blanco. Una «nula» gestión con la que contrastó las actuaciones del gobierno del que forma parte que, en materia de infraestructuras, hizo realidad la Autovía del Cantábrico, «que pasou de estar nun papel cos gobernos do PP a ser unha realidade en servizo no oitenta por cento do seu trazado e o ano que ven estará rematada», aseveró, haciendo hincapié en que «si esto é posible é porque o goberno socialista invistiu 500 millóns na súa execución».

El candidato lucense, que ayer apostó por un atuendo informal, con camisa azul sin corbata y chaqueta oscura, hizo un llamamiento a progresistas y galeguistas «a concentrar o voto nos socialistas para frear á dereita», convencido de que se trata de unas elecciones que se juegan entre dos. «Se empatamos en deputados en Lugo, gañaremos as eleccións en España», aseveró.

«Co voto dos galegos non se pode meter a texoira no Ave a Galicia, nin na axuda polo desemprego, nin a dependencia», aseguró Blanco, al tiempo que recordó que «con Rajoy non se acabará o paro, pero con Rajoy acabarase o dereito a cobrar o paro».

GARCÍA RIVERA:
«Nunca faltou á nosa festa no Santo, nin cando era deputado nin sendo ministro»

El exalcalde de Foz y portavoz del grupo municipal socialista, José María García Rivera, recordó en su intervención el nexo de unión del ministro de Fomento con el municipio focense y, como muestra, recordó la vinculación que mantuvo siempre con los socialistas «apoiando sempre coa su presencia a festa que cada primero de maio facemos na área recreativa de Bispo Santo», un gesto «que é de agradecer», subrayó Rivera, pues «nunca deixou de vir á festa nin cando era deputado nin coma ministro e é digno de agradecer a súa presencia en momentos complicados».

Rivera, que fue alcalde de Foz durante 16 años, agradeció el apoyo expreso de Blanco a diversas actuaciones realizadas por el Gobierno central en el municipio, entre las que citó la construcción de paseos marítimos, el Cenima, las mejoras en la basílica o la autovía del Cantábrico, «da que non había nin un quilómetro e pola que agora se pode circular» y no dudó en calificarlo como «o ministro que máis fixo por Galicia na historia da democracia». Frente a su comportamiento contrapuso la actitud de Feijóo, «o home do traxe, a garabata e a brillantina, que ten a Galicia nos peores parámetros da historia».

Comentarios