Arquitecto de lienzo y pincel

Vicente Roura, en el salón de su casa, con una composición en la que trabaja (Foto: C.Pérez)
photo_camera Vicente Roura, en el salón de su casa, con una composición en la que trabaja (Foto: C.Pérez)

El leit motiv de su obra es la arquitectura, pero pinta edificios al aire libre, en medio del monte. Así es Vicente Roura, un coruñés enamorado de la naturaleza que hace diez años le dio un vuelco a su vida, mudándose de la ciudad que lo vio nacer, crecer y desarrollarse artísticamente para afincarse en una solitaria casa en la aldea de Pena dos Diñeiros, en la parroquia guitiricense de Pedrafita.

«Este es un sitio que me encanta y que encontré por casualidad hace diez años», recuerda el polifacético artista, que en sus años de urbanita ejercía de diseñador publicitario y trabajó como escenógrafo teatral o de películas de animación, como escaparatista o en el departamento artístico de El Corte Inglés.

«Sigo currando, pero a mi manera». Y eso implica tomarse la vida con calma y pintar cuando le apetece, sin horarios. «Estoy tranquilo y vivo muy austero», dice este pintor que reconoce que se toma los pinceles como «una profesión», si bien su auténtica pasión «es el medio natural, el monte me tira mucho».

En Pedrafita logró unir ambas cosas. Ahí instaló su taller y aunque el vivir como un ermitaño tiene sus hándicaps -para conectarse a internet el punto más cercano está a ocho kilómetros- el estar rodeado de «bichos» -tiene una burra, dos perros, un gato y quiere gallinas- y de tranquilidad, ha influido incluso en su forma pintar y quien le encarga una obra -uno de sus últimos proyectos fue un cuadro de gran formato de un edificio de A Coruña-, sabe lo que se va a encontrar.

Y es que sus señas de identidad están presentes en cada cuadro, normalmente pintados con acrílico, desde el intenso juego de colores hasta la recreación de construcciones y edificios según su propia interpretación, porque aunque hace bocetos in situ y fotos, al final, «el recuerdo personal también es importante».

El dibujo, la cerámica, las tallas en madera u otras temáticas que poco tienen que ver con la arquitectura también forman parte de su obra, en la que a título personal guarda un hueco importante para la sátira social y política. Su visión crítica de la actualidad y otros aspectos de su trabajo pueden verse en su blog.

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