ARMH lamenta la ''triste imagen'' que, dicen, han dado el regidor y sus ''palmeros''

El vicepresidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), Marco Antonio González, afirmó que los "palmeros" y "acólitos" que apoyaron al alcalde de Baralla, Manuel González Capón, en el pleno en el que la oposición pidió su dimisión por las declaraciones que hizo sobre las víctimas del franquismo, dieron "una imagen bastante triste".

Marco Antonio González hizo estas declaraciones a EFE después de participar en el pleno, junto con una decena de personas de la asociación, que al terminar la sesión desplegaron una gran pancarta en la que podía verse la imagen de una fosa común con el lema "Nunca debieron ser asesinados".

Para el vicepresidente de la ARMH, la celebración de este pleno fue "un ejercicio de higiene democrática" e insistió en que "el alcalde debería dimitir o por lo menos replantearse a qué dedica su vida, y si tiene que estar en una Administración pública defendiendo a una dictadura y sus asesinatos".

Con respecto al apoyo que le manifestaron sus partidarios al alcalde en el transcurso del pleno, González opina que dejaron "una imagen bastante triste", porque "ese tipo de declaraciones no debería quedar impune".

"Es triste ver como un grupo de acólitos o de palmeros del alcalde aplaudía esas declaraciones. Es muy triste escuchar expresiones como comunistas fuera, rojos fuera o socialistas fuera. La verdad es que te traslada a la época de hace 77 años, cuando en esta zona era el verano caliente, después del golpe de Estado", añadió el portavoz de la asociación.

De hecho, recordó que, después del golpe militar, "día sí y día también se estaban secuestrando a personas en sus hogares, que a día de hoy siguen desaparecidas".

"Esa defensa a favor del alcalde da una imagen muy pobre de la democracia que tenemos y demuestra que nos queda mucho camino por avanzar", dijo González.

Además, afirmó que "para ser alcalde, primero hay que tener unas nociones básicas de primero de democracia", pero "en este país todavía cuesta expedir los carnés de demócrata y parece que cualquiera puede ostentar un cargo".

Con la pancarta que desplegaron sus miembros a las puertas de la Casa Consistorial de Baralla, aclaró González, la asociación pretendía recordar que "el horror existe y sigue debajo de las cunetas", y no se pueden decir "semejantes barbaridades".

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