La Asociación Empresarial de Productores de Cultivos Marinos (Apromar) acaba de publicar un decálogo de propuestas con el objetivo de impulsar la acuicultura marina en España. Las propuestas del colectivo, de llevarse a cabo, serían muy positivas para los intereses mariñanos, ya que la comarca es una de las zonas potentes de la península en la producción de robadallo, una de las especies más valoradas en el mercado.
Apromar aboga por el establecimiento de una legislación unitaria para evitar las diferencias de criterio entre unos países y otros, una circunstancia que incluso se da entre comunidades. Uno de los puntos importantes del decálogo hace referencia a las trabas administrativas, ya que la asociación considera que hay «una excesiva dificultad para la obtención y renovación de permisos y concesiones, lo que está frenando la iniciativa empresarial».
Otro de los puntos criticados desde Apromar es el de la existencia de tasas de puertos «desorbitadas» a las empresas de acuicultura por el uso de las instalaciones portuarias. El colectivo achaca que esta realidad va «contra la igualadad de oportunidades», por lo que pide una «uniformidad impositiva entre todos los puertos de España». Un punto muy polémico es el relativo a la Ley de Costas, ya que esta interfiere en la actividad del sector con una serie de restricciones que difícilmente son subsanables. En el mismo contexto se enmarca la Red Natura 2000, con restricciones que no se adecúan a la situación del mercado y que, por tanto, dificultan el crecimiento del sector.
Etiquetado
Apromar también ve un «deficiente etiquetado» de los productos procedentes de la acuicultura. «A día de hoy en España los consumidores no disponen de información suficiente en las pescaderías como para realizar compras responsables», señalaron desde el colectivo, que considera que la acuicultura es un sector clave para fomentar el empleo en España debido a su crecimiento en los últimos años.
