¿Que cree que fue lo que le hizo ganar el concurso de Recantos?
La base reside en dos puntos principales: primero en el apoyo del público en general, tanto detrás de la pantalla como el que me acompañó durante estos diez meses. Y en segundo lugar, por mi parte yo creo que no estuvo tanto en lo vocal, sino en que tengo muy presente que lo principal es llegar al corazón de las personas que nos están oyendo y creo que esa fue mi punto fuerte como cantante y quizá la otra pieza que ayudó a que pudiéramos alcanzar el triunfo.
Ya que menciona el apoyo de su público, tiene un club de fans, ¿cómo es su relación con ellos?
La verdad es que no me gusta llamarle ‘club de fans’ porque para mí la palabra ‘fan’ lo hace impersonal. Prefiero referirme a ellos como un club de amigos o de seguidores. A la gran mayoría los conozco en persona y a los que no, estoy en contacto con ellos casi a diario a través de las redes sociales –bien por Facebook, bien por WhatsApp–. Entonces la relación con el público y con el ‘club de fans’ es excelente y gratificante.
"Tengo muy presente que lo principal al cantar es llegar al corazón de las personas"
¿Qué supuso el concurso Recantos en su carrrera profesinal?
Pues para mi carrera fue toda una experiencia en todos los sentidos. En lo tocante al compañerismo, tuve la oportunidad de conocer a muchísimas personas dentro y fuera del programa. Dentro, la gente que lo hace posible, a compañeros que participaban en el programa y que ya son amigos. Y luego fuera del programa, a toda mi gente, a todos los vecinos que estuvieron súperinvolucrados estos diez meses. Esta experiencia me ha ayudado a pulir defectos que uno siempre tiene y que está buscando la forma de mejorar y, se verá en un futuro, pero creo que también me va a ayudar en lo que a salida laboral se refiere.
¿Y qué proyectos tiene planeados en un futuro?
Pues ahora mismo, terminar la temporada con la orquesta Kubo. A corto plazo, siempre me he fijado mucho en el mercado latinoamericano. Así que el objetivo –que aún estamos en proceso– es cruzar el charco, conocer esos centros gallegos que tantos mensajes de ánimos y fuerza me han dado.
¿Qué oportunidades cree que se pueden presentar para que finalmente actuar en Suramérica?
De entrada, los centros gallegos siempre han tirado muchísimo por el artista que consideran de su tierra. Mi idea es preparar un espectáculo con canciones gallegas que pienso que pueden dar aire fresco a nuestra cultura y luego hacerlo para que sepan que hay una persona aquí que se siente orgulloso de su tierra y quiere llevarlo por el mundo adelante.
¿Y cómo ve en general el panorama musical gallego?
Está tomando aire fresco, empezando a rejuvenecerse. Están saliendo nuevos artistas que están cogiendo el relevo de todas las personas que se hicieron que Galicia tuviera una cultura musical tan rica como tiene. El panorama lo veo de forma optimista, porque realmente que hay posibilidades.
Quería preguntarle por el tatuaje que tiene del logo del programa Luar de la TVG. ¿Por qué se lo hizo?
Tengo tatuado en el brazo derecho, a parte del nombre de mi mujer y de mis hijos, la canción que les cantamos nada más nacer. Los que amamos los tatuajes, nos tatuamos cosas que nos han marcado. Es una forma de expresar que Luar me marcó para siempre.
¿Qué le diría a alguien que está empezando en el mundo de la música?
Al que esté empezando le daría dos consejos. El primero que tenga paciencia; porque, cuanto más lento haces el camino, más gratificante es la llegada. Lo segundo es la palabra ‘seriedad’, porque no está de moda, pero sí se valora cuando se encuentra.
¿Que aspectos considera que son serios?
Muchas veces se le dice a un cantante: afina bien, vete bien vestido... Eso está muy bien. Pero a parte de eso, hay que tener los pies en la tierra y ser humilde. La gloria es muy bonita y brilla, pero es un brillo muy efímero. Hoy soy ganador del concurso Recantos y mañana quedar en el más absoluto olvido, por ello hay llevarlo con humildad y que hay que ser constante.
