Amor sin fecha de caducidad

El matrimonio, a la izquierda, con sus allegados. TOÑO PARGA
photo_camera El matrimonio, a la izquierda, con sus allegados. TOÑO PARGA

Febrero es el mes del amor y la iglesia de San Vicente de Monforte fue testigo ayer de una de esas historias sin fecha de caducidad, de las que duran toda la vida. César Conde García y Pilar López González, muy conocidos en Monforte por su actividad empresarial, ya que fueron los fundadores de la Autoescuela Lemos y Conde estuvo vinculado a Caixa Galicia, celebraron sus bodas de oro. En la ceremonia estuvieron acompañados de sus hijos César, Francisco (conselleiro de Economía e Industria de la Xunta de Galicia) y Alejandro Conde López, de sus cuatro nietos y de un nutrido grupo de familiares y amigos.

César y Pilar se conocieron en la adolescencia. Él había nacido en la parroquia pantonesa de Santiago de Castillón, pero con ocho años se trasladó a vivir a Monforte, donde residía Pilar. Con apenas 14 años coincidieron en la Academia Balmes, un centro de estudios de referencia por el que pasaron la mayoría de los estudiantes monfortinos de esa época. Allí comenzó un romance «a ratos», explica Conde, «a temporadas juntos y a temporadas separados, pero con el tiempo cuajó y a los 22 años me casé», añade.

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