Dos productos de toda la vida y una oportunidad única para degustarlos. Es lo que ofrece desde hace cinco años la Festa da Bola de Liscos e das Freces de Bretoña, una cita organizada por la Asociación de Amigos da Feira que citó ayer a centenares de personas en esta parroquia de A Pastoriza, entre ellas una excursión de 50 caboverdianos de la asociación Batuko Tabanka, que acudieron a través del Km0 de la Diputación e hicieron una demostración de su folclore.
La organización preparó unas 2.000 raciones de estos manjares, en cuyo reparto se notó la crisis. «Véndense máis racións, pero menos bolas enteiras, que sempre tiñan boa saída», explicaba ayer el presidente de Amigos da Feira, Luis Lindín.
Además de la gastronomía, uno de los grandes atractivos de la cita fueron sus exposiciones de motos y coches antiguos y las demostraciones en vivo de artesanía. Junto al ferreiro Óscar Villada, la cesteira Mari Carmen Otero, el torneiro Vicente Ledo y el canteiro Ramón Villar expusieron dos artesanos asturianos que acudían por primera vez a Bretoña.
«Isto es estupendísimo», decía el ‘trotamundos’ Samuel Rodríguez, de Tineo, quien con madera y elementos naturales es capaz de elaborar más de cien juguetes tradicionales diferentes.
A su lado llamaba la atención el puesto de Ana Gayo, de Luarca, y su combinación de agujas de tejer con demostraciones del funcionamiento de una desnatadora, para separar leche y nata, y de una ‘feridera’, para hacer mantequilla.
