Al buen samaritano

Marco Antonio Dorado. (Foto. P.V.)
photo_camera Marco Antonio Dorado. (Foto. P.V.)

El ribadense Marco Antonio Dorado se encontraba hace unos domingos en la calle, a las siete de la mañana, cuando se vio enzarzado en una auténtica situación de película, con el problema de que en realidad era él quien estaba siendo apaleado por varias personas.

Explica que mientras esto sucedía en plena calle, la mayor parte de la gente «se limitaba a mirar como si estuvieran en el cine», con alguna excepción «de alguien que los apartaba un poco».

Pero entonces surgió la figura de un inmigrante africano, que se dedica a vender bolsos y algunas baratijas los sábados por la noche en Ribadeo, conocido como Ismael. Fue él quien cogió a Marco Antonio, lo apartó a la acera y se interpuso entre él y sus agresores para desafiarles a que no continuaran pegándole.

Consiga AQUÍ la información completa

Comentarios