La bronca que hubo en el pleno del jueves sobre el convenio urbanístico de Covas sigue coleando y ahora es el exalcalde popular César Aja quien comparece para defender su validez, al tiempo que ataca la gestión en esta materia de los gobiernos socialistas, que «han dado licencias con informes técnicos y jurídicos negativos a través del inusual método del silencio administrativo e incluso sin informes», como sucedió, asegura, con la construcción de la residencia Geriatros. «Que pidan un informe urbanístico, a ver si se puede hacer o no se puede hacer», retó el popular al gobierno local.
El origen de la disputa del pleno es el convenio firmado en el 88 entre el Concello y la familia Rebellón para la «donación en favor del Ayuntamiento de terrenos afectados por el trazado de calles y dotaciones urbanísticas a cambio de que el Ayuntamiento modifique la calificación urbanística de los terrenos objeto del convenio». Aja defiende que el acuerdo está firmado por la secretaria municipal y que en el acta del pleno en que se aprueban sus bases consta que hubo unanimidad de todos los grupos. «En ese convenio estaban los planos del 78 como suelo urbano, y nosotros en el 86 para mejorar las normas subsidiarias hacemos una modificación que es el Peri (Plan Especial de Reforma Integral) de Covas, que también fue aprobado por unanimidad de la corporación, en la que estaba en señor Roel», recuerda.
Once propuestas para invertir el canon eólico
El edil Celestino García propone once actuaciones en las que invertir los alrededor de 110.000 euros que recibirá el Concello a través del fondo de compensación ambiental. Pide que se construya el saneamiento en Porta da Leira y Sacido, se mejore el aglomerado de los barrios de Nogarido y Allares, y el acceso al Pozo da Ferida; la reparación de accesos a burgos de Vieiro, Celeiro, Valcarría y Boimente, o la colocación de paneles solares en edificios oficiales y deportivos, entre otras actuaciones.
