Adjudicadas 14 reses en la subasta de Adai a un precio medio de 2.100 euros

Una de las reses subastadas. J. VÁZQUEZ
photo_camera Una de las reses subastadas. J. VÁZQUEZ

Las buenas expectativas de la asociación de criadores de raza rubia galega Acruga se cumplieron en la subasta celebrada ayer en la parroquia corguesa de Adai, al adjudicarse los 14 ejemplares presentados a la puja por un precio medio de 2.100 por cabeza.

El buen tiempo, y el hecho de ser la última de las grandes subastas del año en la provincia, animó a más de 30 ganaderos gallegos a sacar sus tarjetas para pujar por alguna de las reses. La subasta estuvo muy animada en todo momento, lo que contribuyó a que se superaran todos los precios de salida fijados por Acruga y por los ganaderos de Galicia, Salamanca y Ávila que llevaron sus ejemplares al recinto corgués.

Las once hembras preñadas que se subastaban con precios de salida en torno a los 1.800 euros lograron finalmente una cotización media de 2.040. Algunos de esos ejemplares incluso alcanzaron los 2.550 euros.

La subasta de los machos también se saldó con buenos resultados. De hecho, dos de los animales se adjudicaron por cerca de 2.500 euros. Los 14 animales presentados en total a subasta alcanzaron así un precio medio de 2.100 euros.

Para la secretaria ejecutiva de Acruga, Ángeles Moreno, «la rubia gallega está logrando buenas cotizaciones con una tendencia al alza» pese a la crisis. También César Dorado, presidente del colectivo, sostiene que «cada vez son más los interesados en introducir esta raza en sus explotaciones por la calidad de la carne».

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