Un hombre ha aceptado este martes una condena de cinco años de prisión por agredir en 2016 a su sobrino con un cuchillo de cocina tras haber pasado una noche de copas.
El acusado, de nacionalidad rumana, que está ingresado en prisión desde agosto de 2016 por esa agresión, ha reconocido ante el juez haber intentando acuchillar a su familiar, pero alegó que se encontraba bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
La Fiscalía, que inicialmente solicitaba para él una pena de ocho años de prisión, aceptó su confesión y le aplicó la circunstancia atenuante de embriaguez.
Con su confesión, el acusado ha corroborado que, en la madrugada del 15 de agosto de 2016, salió a tomar unas copas con su sobrino y un amigo.
Durante la velada, discutieron por motivos familiares y llegó a decirle al joven que lo iba a matar si no se ocupaba del cuidado de su hija menor.
Una vez regresaron al domicilio familiar, situado en Silleda, cogió un cuchillo de cocina de unos treinta centímetros y se lo clavó en la zona baja del abdomen, sin darle opción a defenderse, para luego huir, aunque fue detenido horas después.
La víctima permaneció hospitalizada durante ocho días, tres de ellos en la unidad de cuidados intensivos y, según la Fiscalía, las gravedad de las heridas pusieron sus vida en peligro.
