La Comisión electoral de Zimbabue no tendrá que publicar de momento los resultados de las elecciones presidenciales, pese a que hace ya más de dos semanas que se han celebrado.
Un tribunal de Harare ha rechazado el recurso interpuesto por el opositor Movimiento por el Cambio Democrático (MDC), que pedía la publicación inmediata de los datos bajo sospechas de que el régimen del presidente Mugabe está reteniendo las papeletas para propiciar un fraude que lo perpetue en el poder.
Para protestar por tal decisión, emanada de la Corte Suprema, la formación que encabeza Morgan Tsvangirai ha hecho un llamamiento a la huelga general a partir de este martes.
El MDC sostiene que su líder ha vencido a Mugabe en las elecciones, poniendo fin a sus 28 años en el poder. La Comisión Electoral ya ha anunciado que el partido gubernamental, el ZANU-PF perdió el control del parlamento en las elecciones generales del 29 de marzo.
Protestar "contra la arrogancia"
"El consejo ejecutivo nacional ha resuelto llevar a cabo una protesta masiva para manifestarse contra la arrogancia de la Comisión Electoral", ha señalado la vicepresidenta del MDC, Thozokani Khupe. El principal partido de la oposición ha amenazado con presionar mediante "medidas de fuerza" para que los resultados de los comicios se den a conocer.
Hecho el anuncio, llegan los avisos. Un portavoz de la policía ya ha advertido de que cualquier alteración del orden público será reprimida "severamente".
"La policía observa con preocupación la distribución de folletos subversivos y panfletos de la facción Tsvangirai instando a la celebración de una huelga indefinida, y los consideramos como una agitación para la violencia", señaló la fuente.
Re-recuento en 23 distritos
La Comisión Electoral ha anunciado, por otra parte, que el próximo sábado hará un nuevo recuento de 23 circunscripciones electorales, de las 207 en las que se celebró la votación el 29 de marzo, a causa de una serie de irregularidades denunciadas por agentes electorales.
La oposición ha pedido que se paralice ese recuento y se ha quejado de que la Comisión Electoral no permite la entrada de sus representantes al órgano central de cómputos.
El recuento puede poner en peligro la mayoría de votos en la Cámara de Diputados que reúne la oposición. El gobernante ZANU-PF obtuvo 97 escaños, las dos facciones del MDC reunieron 99 y además hubo un legislador independiente.
El régimen de Mugabe ha sido acusado de manipular las elecciones presidenciales del 2002 y las parlamentarias del 2005 y la oposición teme que algo similar vuelva a ocurrir. Por ello, han anunciado que el panorama actual no es el mejor ambiente para la celebración de elecciones, y han dejado claro que Tsvangirai no se batirá en un eventual segundo duelo electoral contra el partido de Mugabe.
