La crítica situación en Gaza empuja a las drogas a un tercio de su población

Los adictos a analgésicos y potentes medicamentos se multiplican en los últimos tiempos
Un grupo de enmascarados hace guardia delante de un coche explotado, en Gaza
photo_camera Un grupo de enmascarados hace guardia delante de un coche explotado, en Gaza

Una vida cada vez con menos opciones, empobrecida y reducida a los 340 kilómetros cuadrados bajo bloqueo israelí por los que se extiende Gaza, lleva a un tercio de su población a caer en las drogas para escapar de las miserables condiciones y de la cruda realidad, aseguran fuentes médicas.

Uno de estos adictos es Ahmad, de 29 años, casado y consumidor de Tramadol, un analgésico parecido a la morfina, desde que en el verano de 2013 un amigo le aseguró que este calmante le haría sentir bien.

"Nuestra situación es terrible y vivir así en Gaza es muy complicado", cuenta este gazatí que no quiere dar su apellido y que asegura que muchos hombres y mujeres jóvenes optan por esta droga para cerrar sus sentidos a la realidad.

Ahmad, antiguo empleado de la policía de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) antes de que el movimiento islamista Hamás se hiciera con el control de Gaza en 2007, comenzó a consumir potentes analgésicos con un bolo intravenoso que le dio un amigo hace cuatro años. De ahí saltó a cinco para escapar de su deprimente situación.

En los últimos cuatro años se ha disparado el uso de todo tipo de drogas: principalmente Tramadol y otros de excitación sexual como el Viagra para hombres, chicles y café soluble especial para mujeres

"Ahora estoy recibiendo tratamiento médico en una institución porque quiero curarme de los malos hábitos que están dañando los riñones y el hígado", dice.

Pero en la conservadora Gaza la salida de las drogas no es un proceso fácil, dado que los adictos nunca hablan en público sobre su problema.

Los psiquiatras aseguran que hay cientos de miles en un lugar donde dos millones de palestinos viven en 340 kilómetros cuadrados, gobernados por un gobierno islamista, y bajo un bloqueo israelí y egipcio que deja poco espacio para la esperanza.

Ibrahim Zaqout, psiquiatra, comenta que en los últimos cuatro años se ha disparado el uso de todo tipo de drogas: principalmente Tramadol y otros de excitación sexual como el Viagra para hombres, chicles y café soluble especial para mujeres.

"Estaríamos hablando de un 35 por ciento de la población de la Franja, hombres y mujeres, adicto a las drogas", señala este especialista.

La droga suele entrar, relata, por los túneles bajo la frontera con Egipto, los mismos que fueron cavados con el permiso del gobierno de Hamás para abastecer la Franja de todo tipo de productos básicos y armas, debido al bloqueo que Israel impuso en 2007.

La droga suele entrar por los túneles bajo la frontera con Egipto, los mismos que fueron cavados con el permiso del gobierno de Hamás para abastecer la Franja de todo tipo de productos básicos y armas

En su época dorada llegaron a haber hasta 1.400 túneles, aunque las autoridades egipcias han neutralizado y demolido la mayoría.

"No había ningún control sobre el envío de mercancías desde Egipto a Gaza a través de estos túneles, y esto ayudó a introducir enormes cantidades de drogas", cuenta el psiquiatra.

Sobre qué lleva a los gazatíes a recurrir al consumo, argumenta que las "duras condiciones de vida" en general, que se traducen en "altas tasas de pobreza y desempleo" y "la pérdida de esperanza de un cambio a mejor".

Un cambio que ponga fin al bloqueo israelí o que resuelva la división interna entre Al Fatah y Hamás.

"Todos son factores que empujan al consumo", subraya Zaqout.

El domingo, en un caso sin precedentes, un tribunal militar de Hamás condenó a muerte a dos narcotraficantes, uno de ellos bajo arresto, el otro fugado en Israel.

El domingo, en un caso sin precedentes, un tribunal militar de Hamás condenó a muerte a dos narcotraficantes, uno de ellos bajo arresto, el otro fugado en Israel

El jefe de los Tribunales Militares de Gaza, el general de brigada Naser Suleiman, reveló que a día de hoy tiene abiertos treinta expedientes por tráfico de drogas y agregó que el fiscal general los llevará pronto ante la corte.

"Cuatro casos de traficantes especialmente peligrosos fueron sentenciados el domingo por el tribunal, dos de ellos fueron condenados a la pena capital, otro a nueve años de prisión y un cuarto a siete", precisó.

En la última semana las autoridades han confiscado dos camiones llenos de drogas, en una campaña de la policía de Hamás y de sus otras fuerzas de seguridad contra los traficantes.

El coronel Ahmed al Qedra, jefe de la policía antidrogas en la Franja, indicó que éstas también son introducidas de contrabando a través del mar desde países vecinos y acusó de su profusión por toda la Franja a aquellos interesados en evitar que los palestinos participen en la resistencia contra la ocupación y tener ocupadas sus mentes.

"Es un fenómeno inmenso y horrible", sentenció en un comunicado de prensa Eyad al Bozom, portavoz del Ministerio de Interior.

Según él, la cantidad de drogas, sobre todo Tramadol, que la policía se ha incautado sólo en enero de 2017 es similar a la de todo 2016, lo que a su entender requiere mano dura y severos castigos contra todos los traficantes que "dañen y arruinen al pueblo y sus vidas".

"Estos mercaderes de muerte deben ser severamente castigados por nuestros tribunales de acuerdo con la ley", concluyó sobre un fenómeno cuyo verdadero alcance está aún por cuantificar.

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