Los cabecillas de los 'camisas rojas' han solicitado a los manifestantes que aún se encuentran en las calles de Bangkok que se rindan tras el asalto del Ejército al bastión de los opositores. El principal líder del frente rojo, Jatuporn Promphan, anunció por el sistema de megafonía instalado en el campamento, que se entregaría para evitar más pedidas de vidas humanas
''Les pido perdón a todos pero no quiero más pérdidas. Yo también estoy desolado. Nos rendimos'', estas fueron las palabras de Promphan tras el ataque de las fuerzas armadas tailandesas. A pesar de esta declaración, es posible que el final de la crisis no se alcance con inmediatez y aún permanezcan manifestantes continuando su lucha.
Poco después de pronunciar el discurso de rendición, Promphan y otros líderes del frente fueron escoltados por agentes de la Policía hacia el cuartel general de la institución, situado a escasa distancia del campamento, en el que antes del asalto permanecían cerca de 3.000 manifestantes.
Así, fuentes militares habían anunciado que una de las prioridades de la operación era capturar a los líderes, sobre todo aquellos que han sido acusados de ''actos terroristas''. Varias decenas de manifestantes han sido detenidos, entre ellos más de veinte paramilitares de los equipos de seguridad de los 'camisas rojas', a quienes se les incautaron varias armas de fuego.
Un periodista italiano muerto
La ofensiva que ha tenido lugar este miércoles al bastión del frente rojo, considerada la primera fase del asalto final, ha sido consideradaun éxito por parte del Gobierno tailandés. En este asalto, han muerto cuatro personas y otras 50 han resultado heridas. De las víctimas mortales, una de ellas es un reportero italiano.
Según ha precisado la televisión tailandesa, otro periodista habría resultado herido durante los enfrentamientos, aunque no se ha especificado su nacionalidad.
El portavoz en funciones del Gobierno, Panithan Wattanayakorn, ha explicado que la operación militar continuará con el objetivo de ''asegurar el perímetro'' del campamento rojo. Así, durante la madrugada de este miércoles el Ejército tailandés ha roto las defensas del atrincheramiento de los 'camisas rojas' con tanques y disparando gases lacrimógenos.
En un mensaje televisivo el portavoz del Ejército, Sansern Kaewkamnerd, ha afirmado que ''la situación general está bajo control'' y que las ''fuerzas de seguridad han puesto fin a su ofensiva''.
