El crimen de una joven de 20 años conmociona a la pacífica Islandia

El cadáver de Birna Brjánsdóttir apareció cerca de un faro ocho días después de su desaparición. La tasa de homicidios del país es una de las más bajas del mundo
Birna Brjansdottir
photo_camera Birna Brjansdottir

En Islandia apenas hay asesinatos, muchos años no hay ni un solo homicidio y la Policía regular no lleva armas. De hecho, la primera vez que un islandés murió por un disparo de un agente fue en 2013. La noticia, por llamativa, se hizo viral. Como también lo es ahora, por inusual, el asesinato de la joven Birna Brjánsdóttir, de 20 años. Su cadáver apareció este sábado en una playa, junto a un faro, ocho días después de su desaparición.

El caso acapara horas y horas de televisión en la pacífica Islandia, donde viven 323.000 personas. Birna desapareció el 14 de enero a las cinco de la madrugada. Había salido de copas con sus amigos por Reikiavik y a esa hora unas cámaras la captaron caminando a duras penas por las calles de la capital islandesa. Se dirigía a un establecimiento a comer un kebab.


La tasa de homicidios de Islandia en 2013 fue de 0,3 por cada 100.000 habitantes


Desde ese momento un enorme operativo policial, con la ayuda de 750 voluntarios, la buscó sin descanso durante ocho días. Sus zapatos aparecieron en un puerto al sur de Reikiavik, cerca de donde un barco groenlandés atracó esa misma noche. También allí cerca había un coche rojo con restos de sangre. La Policía ató cabos. El barco, el Polar Nanoq, que zarpó al día siguiente, fue obligado a volver a tierra para interrogar a los marineros. 

Tras el hallazgo del cadáver, dos de ellos, de 25 y 30 años, han sido detenidos, aunque no hay pruebas concluyentes que los relacionen definitivamente con la muerte de Birna.

PAÍS CONMOCIONADO. La tasa de homicidios de Islandia en 2013 fue de 0,3 por cada 100.000 habitantes. Solo uno, el de aquel policía que disparó a un hombre armado que se había atrincherado en un edificio y amenazado a sus vecinos antes de comenzar un tiroteo con los agentes. En España, ese mismo año, la tasa fue de 0,6 homicidios por cada 100.000 habitantes. En Honduras, la mayor del mundo, de 90,4.


Tras el hallazgo del cadáver, dos marineros groenlandeses han sido detenidos


En Islandia, que es uno de los países con más suicidios del planeta, hay años, como 2003, 2006 o 2008, en los que no se registra ningún asesinato. Por eso la conmoción de los islandeses por la muerte de la joven Birna, un crimen para el que todavía faltan muchas respuestas.

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